viernes, 23 de septiembre de 2016

"Hombres armados vienen presionando a campesinos tolimenses para que voten el plebiscito No”: Pedro Antonio Varón Gutiérrez

Pedro Antonio Varón Gutiérrez. Foto Nelosi
Por Nelson Lombana Silva

El presidente de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), subdirectiva Tolima, Pedro Antonio Varón Gutiérrez, denunció ante el ministro del interior, Juan Fernando Cristo Bustos, en su reciente gira por Ibagué, de que hombres armados estarían presionando a los indígenas y campesinos para que voten el plebiscito por el No.



Según el líder sindical, estos graves hechos se estarían realizando en varios municipios del Tolima, entre otros: Coyaima, Natagaima y algunas veredas del municipio de Venadillo. Denunció el vil asesinato del líder indígena y miembro del Partido Comunista y la Unión Patriótica en Mesas de San Juan, jurisdicción del municipio de Coyaima.


Se trata del camarada Ramiro Culma Capera, quien fue ultimado a sangre fría el pasado 17 de septiembre en esta comunidad indígena a punta de tiros de fusil, según se indicó por una cuadrilla de diez malhechores que se movilizaba con camuflaje y armas de largo alcance, preguntando por personas propias de la zona.


Denunció también la forma como miembros del Centro Democrático vienen generando terror desde las redes sociales. Se han atrevido a amenazar de muerte al mismo presidente de la república y a docentes comprometidos con el proceso de paz y el Sí en el plebiscito.


Al respecto, dijo que junto al comité de derechos humanos, habían colocado demanda penal contra varios miembros del Centro Democrático.


La página web: www.pacocol.org lo entrevisto y esto dijo:

-         Se reunió usted brevemente con el ministro del interior Juan Fernando Cristo Bustos, haciendo una serie de denuncias. ¿De qué se trata estas denuncias?


Efectivamente, a nombre de la mesa de organizaciones sociales por la paz que reúne más de 34 organizaciones de diferentes procesos y visiones sobre la realidad del país y sobre el apoyo a la salida al conflicto armado, hicimos una denuncia de manera rápida en la medida en que el tiempo no daba tal como venía la agenda del ministro de gobierno.


La denuncia consistió en las denuncias que han venido haciendo los campesinos y algunas autoridades del departamento de Tolima, de la presencia de hombres armados presionando a los campesinos y a los pobladores para que voten no en el plebiscito, específicamente en los municipios de Coyaima, Natagaima, en algunas veredas del municipio de Venadillo, tal como lo denunció el alcalde hace tres días.


De tal manera que estos hechos aunados al asesinato de un líder indígena en una vereda del municipio de Coyaima, obviamente tiene que generar un clima de preocupación y lo que significa es una falta de garantías del gobierno nacional para el ejercicio democrático de la búsqueda de quienes estamos por una salida del conflicto armado y estamos por el Sí en el plebiscito.


Nuestra exigencia, indudablemente, es que tiene que darse una campaña dentro del respeto mutuo, dentro de la confrontación razonada de los argumentos por una u otra posición y no mediante la amenaza o la intimidación como lo vienen haciendo los amigos del No.


-         ¿Quiere decir usted que estarían grupos armados en el Tolima obligando a las comunidades a votar el plebiscito por el No?


No nos cabe la menor duda de acuerdo a la denuncia que han hecho los pobladores de las zonas mencionadas. Pero, además, en las redes sociales algunos sectores del llamado Centro Democrático, insisto algunos sectores del Centro Democrático, han venido haciendo inclusive amenazas de muerte al propio presidente de la república, tratando de intimidar a educadores que han venido ese trabajo en las instituciones educativas.


-         Precisamente usted como presidente la CUT y el comité de Derechos humanos instauraron una demanda penal contra algunos miembros del Centro Democrático. ¿Por qué?


Efectivamente, nos vimos forzados a instaurar un denuncio penal en contra de personas del Centro Democrático que ha venido en las redes sociales haciendo amenazas de muerte, insultos permanentes a quienes estamos haciendo la campaña del Sí, específicamente en cabeza de un educador, distinguido activista sindical en la ciudad de Ibagué, donde amenazan inclusive con asesinarlo y estar incitando a la violencia directa contra las personas que estamos en la campaña del Sí.


-         ¿Quiénes son estos miembros del Centro Democrático?


Lamentablemente hay que decirlo, pero son personas que tienen una representatividad política en la región. Por razones obvias y de respeto, nos reservamos sus nombres, sus nombres están en la Fiscalía, aparecen en la página donde ellos han venido haciendo ese tipo de cosas. Se presentaron las pruebas pertinentes y nuestro llamado es al respeto, a la tolerancia, porque no podemos hablar de paz, construir la paz con un lenguaje de guerra, con un lenguaje de señalamientos, intimidación, de amenazas.


Quienes piensan así, lo que creemos es que añoran las épocas donde la mal llamada “seguridad democrática” convertía en enemigo interno a todo el que pensaba diferente y el paramilitarismo que se enseñoreaba en todo el territorio patrio, asesinando, desplazando, desterrando. Así comenzaban con las amenazas directas y después aparecieron los cadáveres y después aparecían los desplazamientos. Esa historia nefasta no se puede repetir en este momento crucial de la historia de Colombia, donde la mayoría de los colombianos vamos a votar Sí en el plebiscito, precisamente, para superar este tipo de cosas que convierte en víctimas a la mayoría de la población.

 
-         Entonces, ¿Sigue latente la presencia del paramilitarismo en el Tolima?


Pese a que las autoridades policiales niegan la existencia de grupos paramilitares, lo cierto es que estas denuncias lo que corroboran es que existen grupos armados organizados, con visión guerrerista que vienen amenazando a las comunidades y que vienen sembrando el temor y el terror en sitios donde específicamente se movían grupos paramilitares, hoy aparentemente desmovilizados, pero que siguen teniendo algunos grupos armados controles territoriales e inciden en las decisiones democráticas y libres de la población.


-         A pesar de todas esas dificultades, la campaña por el Sí cada día que pasa gana más partidarios y adeptos. ¿Qué percepción tiene usted?


Significa que las razones son más poderosas y más fuertes que las conveniencias. Y, obviamente, no puede haber una persona que racionalmente piense, más allá de sus intereses personales y que pueda estar por perpetuar la guerra en Colombia.


Nosotros pensamos que la fuerza del Sí, la fuerza de la búsqueda de una salida del conflicto social y armado en Colombia de manera civilizada, a través del apoyo de los diálogos de la Habana y de la exigencia de las negociaciones entre el gobierno y el ELN, es una razón poderosa para quienes creemos que es posible convivir en un país pese a que pensemos diferente y a pesar de que tengamos intereses totalmente diferentes. Solamente los negociantes de la guerra, los negociantes de la muerte, aquellos que han hecho del dolor, de la miseria, del desplazamiento, del despojo, una forma de vivir y de hacer política, pueden estar por el No, en este plebiscito de las próximas elecciones que el pueblo colombiano tendrá que definir, cuál es el camino. Si es el camino de la guerra, de la muerte, del dolor o es el camino de la convivencia y la construcción democrática del nuevo país.


-         ¿Qué agenda tiene la CUT Tolima para publicitar el Sí en el plebiscito en los pocos días que quedan de campaña?


Vamos a participar activamente este sábado de una movilización y de un foro en el municipio de Líbano (Tolima), creemos que es supremamente importante porque este polo de desarrollo del norte del Tolima, ha sido escenario de diferentes confrontaciones desde la época del bipartidismo, ha padecido la violencia paramilitar, ha visto la presencia de la insurgencia, de la confrontación de la insurgencia y el Estado colombiano.


Como es apenas natural, en este tipo de escenarios es donde más validez tiene aún la propuesta de apoyo a la salida del conflicto social y armado y el apoyo del Sí al plebiscito.


Igualmente, estamos participando de las diferentes actividades de todas las organizaciones sindicales filiales. La entrante semana hay una asamblea de carácter departamental del magisterio, donde vamos a participar activamente impulsando, no solamente nuestras propuestas gremiales, sino nuestras propuestas políticas de apoyo al Sí y al acuerdo de la Habana y la exigencia de continuar las negociaciones con el ELN y con los otros sectores de la insurgencia.


-         Se hace prioritario que el gobierno nacional agilice las conversaciones con el ELN, ¿Está usted de acuerdo?

Efectivamente, en el mes de marzo, el gobierno nacional y la insurgencia del Ejército de Liberación Nacional, dieron a conocer un comunicado donde consignan unos acuerdos previos para comenzar la negociación en lo que ellos denominan mesas públicas de negociación en otros países. Inclusive, nombran los países en los cuales se irían a desarrollar este tipo de negociaciones.


De manera inexplicable, el gobierno nacional suspende ese tipo de negociaciones y lo que comienza es a desarrollar una ofensiva militar en algunos territorios localizados que en la práctica niega la prédica de paz del propio gobierno.


Es decir, mientras impulsamos la salida del conflicto armado con el apoyo, al importante histórico acuerdo entre las Farc y el gobierno nacional, el gobierno se hace el de la vista gorda con los otros sectores de la insurgencia.


Aquí no puede haber una salida del conflicto armado a medias. Aquí, no puede haber una paz incompleta, aquí, no puede hacer un cese de la realmente por una negociación del conflicto armado y superar esa página nefasta de la historia de Colombia o simplemente está tratando de llevar a un sector de la insurgencia a que siga la confrontación armada y a que se pueda en última entorpecer, el proceso de salida construida entre el gobierno y las Farc durante tantos años.




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