El genocidio contra la izquierda en Colombia continúa, sin que el presidente de la república Iván Duque Márquez se dé por enterado. Ayer, fue asesinado un desmovilizado de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, Ejército del Pueblo (Farc – Ep), en el municipio de Ataco (Tolima), hacia las diez de la mañana.
Según se pudo establecer, un grupo fuertemente armado, irrumpió en la vereda Berlín, donde se encontraban varias personas haciéndole frente a la pandemia del coronavirus, entre ellos el desmovilizado, Carlos Alberto Castillo, quien fue sacado de su modesta vivienda y asesinado sin mediar palabra. Los campesinos, entre ellos varios desmovilizados, solicitaron ayuda a la policía de Rioblanco, pero la respuesta de los uniformados fue displicente e inoportuna. “Cuando ustedes mataban policías hay si no intercedían a favor de la vida”, fue la respuesta que al parecer obtuvieron los desmovilizados que laboran en este municipio, ubicado al sur del departamento del Tolima.
Con este asesinato en completo estado de indefensión de la víctima, se incrementa el número de asesinatos de los ex guerrilleros que creyeron en el proceso de paz concebido en la Habana (Cuba) y firmado en Bogotá (Colombia), entre las Farc – Ep y el Estado Colombiano. La guerra sucia se intensifica en todo el país, sin que las autoridades hagan el menor esfuerzo por parar este baño de sangre.
La política de extermino continúa enseñoreándose a lo largo y ancho del país, mientras tanto el gobierno nacional, conspira contra la hermana República Bolivariana de Venezuela, en cumplimiento de las órdenes del imperialismo colombiano.
Hay desconcierto y miedo en el sur del Tolima, tanto en los campesinos como en los desmovilizados del entonces movimiento guerrillero. La comunidad señala la indiferencia del militarismo y la policía, ante estos hechos abominables y repudiables. Tampoco se da por enterada, lo que muchos advierten como una estrecha complicidad, en lo que se conoce como el binomio militar – paramilitar, que tanto se ha denunciado nacional e internacionalmente.
Todavía el Partido legal, constitucional, Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común (FARC) no ha hecho un pronunciamiento oficial. Se espera que en las próximas horas haya una declaración pública por parte de los voceros autorizados de esta organización política.
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