Vista parcial del evento. Foto Nelosi |
Por Nelson Lombana Silva
Miembros de la mesa ibaguereña de organizaciones sociales para la paz, reunidos el pasado 24 de febrero en la biblioteca Soledad Rengifo de la ciudad de Ibagué (Tolima), caracterizaron la administración municipal que viene desarrollando el médico Guillermo Alfonso Jaramillo Martínez.
El encuentro se prolongó durante gran parte de la mañana, centralizó la discusión en tres puntos centrales: Contextualización de la actual administración municipal, metodología de la construcción de la pedagogía por la paz y ruta política de interlocución permanente con la administración municipal.
En desarrollo del primer punto hubo bastante crítica a la administración que viene desarrollando el médico Jaramillo. Es una administración cerrada con pocas posibilidades de participación de la comunidad en la dinámica de construir un proceso democrático que responda a las expectativas de una comunidad sacudida por la pobreza, el desempleo y la galopante corrupción prácticamente a todo nivel.
En cuanto a la construcción de una metodología o pedagogía para la paz el aporte colectivo resultó bastante fluido por parte de los asistentes. El tema central giró en la implementación de lo acordado en la Habana entre las Farc – Ep y el gobierno nacional, lo mismo que la participación activa en los diálogos con ELN. Se concluyó en que resulta vital estimular la participación activa de la población tanto en el proceso de implementación como diálogo. Hacer entender a la comunidad – por ejemplo – que la agenda de la Habana es de la comunidad en general, principalmente.
En ese sentido, resulta de suma importancia desarrollar este espacio de paz que poco a poco y contra viento y marea se ha venido construyendo. En ese sentido, el dirigente sindical Ismael Perdomo propuso autonomía de la mesa, tener iniciativa propia.
Esta iniciativa fue ampliamente apoyada. “Se trata – dijimos – de mirar menos hacia el palacio municipal y más hacia los barrios, las comunas y las veredas de la ciudad musical de Colombia”.
Se reajustó la dinámica de la mesa para que juegue realmente un papel importante en la gran disputa por la paz con justicia social en esta sección del departamento del Tolima y de Colombia.
Algunas opiniones de los asistentes
El dirigente del sindicato de trabajadores agrícolas del Tolima (Sintragritol) y de Fensuagro, Gilberto Salinas Novoa, dijo al caracterizar la administración municipal: “Tenemos que tener claro al caracterizar la gestión de Jaramillo que él es un socialdemócrata”.
En cuanto a la dinámica de la mesa por la paz, Salinas Novoa dijo que había que ser coherente. “Tenemos la obligación los dirigentes aquí presentes de socializar los acuerdos de la Habana para obligar al Estado, al gobierno a implementarlos”.
“Creo que así sea Jaramillo o no sea Jaramillo, tenemos que actuar. Miren lo que tenemos de gobernador: Un paramilitar. Nosotros tenemos que organizarnos y formar un gran bloque de resistencia y socializar los acuerdos de la Habana”, insistió. “La idea no es si Jaramillo quiere o no quiere, la idea es organizar el pueblo para que asimile los acuerdos y los defienda”, anotó.
Evelio Villarreal Herrán, miembro de la Unión Patriótica, expresó: “Resulta muy difícil trabajar con el compañero Jaramillo, él no tiene continuidad”. Agregó: “En cierta oportunidad le dije: Si usted no nos recibe, ¿Cómo vamos a salir a defenderlo de esos noticieros reaccionarios, de esa la lucha mediática que hay aquí, en lo local y lo departamental? Me parece que es urgente que esta mesa de paz la traslademos a los barrios, a las juntas de acción comunal, en eso puede incidir el señor alcalde si tiene voluntad política de verdad”.
“A mí me parece que ese cuentico de que los liberales y los del Centro Democráticos fueron los que le ayudaron para que finalmente llegara a la alcaldía, eso no es cierto. En el barrio Jardín donde yo tengo mis amigos, estuvo en tres sitios y en los tres sitios llenamos el espacio”.
Subrayó: “Estoy de acuerdo con los compañeros que vienen planteando que hay trabajar más en los barrios, en las comunas y en las veredas que en cualquier otro sitio”.
Antonio García, presidente de Astracatol, salió en defensa del alcalde al afirmar: “Si no fuera por él no tendríamos este espacio. Creo que nosotros no podemos empezar a criticar, se trata de tener iniciativas propias, iniciativas que ayuden a crecer nuestra organización, la unidad y el tema de la paz”.
Gilberto Sierra, presidente de Sintragritol: “La propuesta es que nos reunamos cada mes, pero para presentar un informe qué venimos haciendo en los barrios con las bases, porque si nos vamos a reunir nosotros cada mes acá para entre nosotros echarnos el mismo cuento, creo que así no hacemos nada, compañeros”.
Rodrigo Valero Garay, miembro de otra mesa de paz: “Creemos que la gente tiene propuestas en las comunas, en los barrios, en las veredas y los distintos municipios propuestos de paz. Hay que canalizar esas iniciativas para la implementación en el caso de las Farc y en el diálogo de Quito con el ELN”.
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