“La Up es un movimiento revolucionario, unitario con vocación de poder”

Danilo López Carrero, presidente municipal de la Unión Patriótica. Foto Nelosi

Nelson Lombana Silva

El veterano dirigente regional del Partido Comunista de la ciudad de Ibagué, Danilo López Carrero, fue ungido como presidente municipal de la Unión Patriótica el pasado 15 de octubre.

Asume esta tarea con gran expectativa teniendo en cuenta el significado histórico y político que ha jugado la Up en la lucha revolucionaria en Colombia desde su fundación gracias a los acuerdos suscritos entre las Farc – Ep y el entonces presidente Belisario Betancur.

Señala sin rodeos que “la Up es un movimiento revolucionario, unitario con vocación de poder”, que debe prodigarse a fondo a construir la unidad en Colombia de la izquierda para ser realmente opción de poder.

Le sale al paso a todo tipo de oportunismo, sobre todo de aquellos que la quieren llevar a una simple Ong o una asociación de víctimas. Según López Carrero, la Up es algo más.

Se declara dispuesto a luchar por la unidad interna de la Up, lo mismo que la búsqueda de acuerdos unitarios con otros sectores de cara a los procesos electorales que se avecina. Plantea, igualmente, la necesidad de apoyar sin dilación lo acordado en la Habana, Cuba, su implementación para ir aclimatando la paz con justicia social en este país.

La página web: www.pacocol.org habló con el dirigente upeísta y esto dijo una vez investido como presidente municipal:    

-         ¿Cuáles son las expectativas que puede ofrecer la Unión Patriótica en la ciudad de Ibagué?

Las expectativas son muchas, en momento de coyuntura donde el país está discutiendo cómo acabar con un conflicto que ha generado tantísima violencia y negocio a los que viven de la sangre de los pueblos. Tenemos que generar mucha unidad, organización y claridad política al interior de las comunidades para que ellas entiendan perfectamente cuál es la misión histórica y política de la Unión Patriótica. Tenemos que organizarnos para ayudar a construir un nuevo país.

-         ¿Cómo viene analizando usted los resultados del plebiscito del 2 de octubre?

Tenemos que manifestar nuestro descontento con las personas que se dejaron engañar por las mentiras de estas mentes trastornadas, llenas de odio, de venganza, que no quieren el país, no se preocupan por él, se preocupan solo por sus bienes particulares, por| sus bolsillos. Es una minoría que se considera dueña de este país.

Engañaron a la mayoría de pueblo que votó equivocadamente por el No. Eso ha sido muy doloroso, muy triste que un pueblo que ha sufrido tanto y tiene tantas necesidades por resolver, en lugar de apoyar un proceso de paz que tiene consigo una negociación para construir un nuevo país para incluirnos todos y recuperar nuestra soberanía, nuestra dignidad, la democracia y la posibilidad de hacer política sin el temor de que uno porque piensa distinto al vecino de una vez sea declarado enemigo, no se haya podido cristalizar el 2 octubre.

Eso es muy triste, pero a su vez, nos llena de entusiasmo ver cómo la gente ha reaccionado al darse cuenta que se equivocó y que lo que hay que hacer es construir este proceso de paz, defenderlo y salir a que este gobierno lo avale, lo apruebe y lo empecemos a construir entre todos. Esa es la salida que nosotros vemos y esa será una de las tareas que emprenderá la Up en el municipio, encaminada a crear una opinión favorable a la paz con justicia social y a la unidad de todos los sectores democráticos para construir un movimiento que aspire a gobernar algún día a este país para poder resolver todas las inquietudes y expectativas del pueblo.

-         ¿Qué es la Unión Patriótica? ¿Qué debería ser? Para algunos debería ser una Ong, para otros una especie de asociación de víctimas y para otros un movimiento o partido revolucionario con espíritu transformador. ¿Cuál es su opinión?

La Unión Patriótica surgió con la tercera propuesta que usted plantea; la Unión Patriótica es una organización de izquierda, revolucionaria, profundamente democrática, es una propuesta de paz, que surgió, precisamente, de una negociación con el gobierno nacional de Belisario Betancur, para que fuera un Partido de los sectores que pensamos diferente al establecimiento, nos pudiéramos organizar y expresar políticamente en las urnas y pudiéramos elegir representantes que pensaran como pensamos nosotros y lo logramos, tuvimos más de 16 representantes a la cámara y al senado, tuvimos alcaldías de muchas regiones de Colombia. Elegimos en el Tolima el primer alcalde comunista en Colombia, que fue el compañero José Nelson Tovar Rojas.

Es decir, la Up irrumpió en el escenario nacional como una alternativa hacia la solución de muchos problemas sociales y la esperanza de paz con justicia social, que el país reclama hace más de doscientos años. Pero, desgraciadamente, fue malinterpretada, como ha sido malinterpretada la negociación que hoy se está desarrollando y entonces, la violencia irracional se impuso con el aval de la clase gobernante, la clase dominante. La Up fue prácticamente eliminada en su totalidad.

Esa oportunidad fue truncada. Pero, la raíz, la semilla está ante los deseos de este pueblo liberarse. Por eso, la Up tiene que seguir siendo ese movimiento de su origen, con esos ideales de cambio, de transformación, de izquierda, de revolucionaria, progresista, democrática, abierta a todos los sectores que piensan como piensa el pueblo colombiano.

No consideramos a la Up una simple fachada de remedos de izquierda, la Up tiene que jugar un papel de izquierda revolucionaria, democrática, unitaria y con vocación de poder. No creemos en eso que sea una Ong o una simple asociación de víctimas. No, la Up va a defender sus víctimas, va a reclamar por sus víctimas, sigue reclamando, no nos vamos a echar para atrás, debe haber verdad, justicia, reparación y compromiso de no repetición, pero el fundamento de la Up es la lucha revolucionaria y transformadora, la construcción de las relaciones democráticas y por qué no socialistas que necesita con urgencia Colombia. La Up no pude ser solamente para dar avales, esa postura hay que derrotar categóricamente. Creo que eso son los postulados de la principal fuerza política que hace parte la Up, el Partido Comunista Colombiano.

Claro, las demás opiniones caben dentro de la Up, pero dentro del respeto y la aceptación de sus principios, no como opción de arrollar a los demás y desacreditar a los verdaderos dirigentes porque en ese papel si nosotros no vamos a caer, ni estamos dispuestos a participar.

 
-         La izquierda continúa dividida incluso, polarizada. ¿Cuál va a ser el papel unitario de la Up en el caso particular de Ibagué?

Primero hay que pensar en reorganizar la Up que como todo sabemos fue víctima del genocidio por parte del Estado, principalmente. Hay resolver contradicciones internas, vicios y malas interpretaciones. En este proceso tenemos que gastarnos un buen tiempo a partir de ahora.

Luego, el papel unitario con amplios sectores en el marco de los acuerdo de la Habana, en el marco del estatuto de la oposición. Tenemos la esperanza que se va a desarrollar un movimiento amplio, democrático y progresista en este país, consideramos que la Up será parte activa y decisiva en ese proceso unitario.

La propuesta es tener buenos candidatos de cara a las próximas elecciones y ser realmente opción de poder en Colombia y en Ibagué, por supuesto.