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| Compañero David Martínez Durango dirigente comunista de los llanos orientales. foto Nelosi |
Como la obra del escritor Juan Rulfo el “Llano en llamas”, esta extensa y maravillosa región colombiana que limita con la hermana república bolivariana Venezuela y Brasil, padece una crisis de vastas proporciones en distintos escenarios de la existencia humana.
Aflora allí, los contrastes más insólitos: De un lado la riqueza y del otro lado la miseria galopante en la inmensa mayoría del pueblo llanero. Dicho contraste no es producto de hechos fortuitos o sobrenaturales como dirían algunos ingenuamente. Dicho contraste obedece a la política depredadora y criminal por cierto del sistema capitalista. Su empeño por saciar los intereses de la clase oligárquica, sacrifica el desarrollo de la comunidad que transita a diario la llanura con decisión y coraje.
La presencia fantasmal de las monstruosas multinacionales y transnacionales viene asolando la región, convirtiéndola rápidamente en gigantesco desierto. Imágenes dantescas vimos en televisión estos días, sobre la muerte de miles y miles de especies animales, como también vimos al presidente de la república evadiendo el bulto de la responsabilidad, pretendiendo responsabilizar exclusivamente a las leyes de la madre naturaleza, cuando todos sabemos que el colapso ambiental es producto ante todo de decisiones políticas de un régimen criminal y antidemocrático que como el capitalismo está dispuesto a acabar con la madre naturaleza con tal de que todos los días, estar aumentando los réditos económicos para una clase ínfima y todopoderosa.
El robo de recursos naturales, como el petróleo viene asolando la zona. Ahora se agudiza la situación con la imperialista política minero – energética que los Estados Unidos imponen y el gobierno nacional mansamente obedece.
Un relato descarnado de lo que viene sucediendo en los famosos Llanos Orientales, lo hace el dirigente comunista David Martínez Durango, quien nació en el municipio del Castillo, Meta el 17 de noviembre de 1967, y desde los diez años, dice, comenzó a escuchar hablar de comunismo y resistencia campesina y popular, entrando a militar en la Partido Comunista directamente hace aproximadamente 20 años.
Se conoce la extensa zona como la palma de su mano. Especialmente la problemática de la comunidad, sus frustraciones y sus sueños. Cree en la paz con justicia social y en los cambios socio – económicos con el concurso de las masas organizadas, por eso insiste en la unidad de las distintas expresiones de las izquierdas que hay en los Llanos para avanzar en la lucha y la resistencia contra el neoliberalismo y la política expoliadora que bien viene implementando Santos, entregando la soberanía nacional a las voraces multinacionales y transnacionales.
Su voz retumba en la zona con autoridad, profundo espíritu unitario y revolucionario. Las páginas web: www.pacocol.org y www.semanariovoz.com dialogaron con el dirigente comunista y esto dijo:
- Compañero David Martínez Durango, ¿Cuáles son los principales problemas actuales del departamento del Meta?
Uno de los mayores problemas de este momento es la incidencia petrolera – minera, que están incursionando en diferentes regiones de la Amazonia y la Orinoquía y en regiones como Yopal, Casanare; pero también lo que viene sucediendo en Pacific Rubiales con las grandes multinacionales que están haciendo extracción petrolera a cielo abierto, lo mismo que con las concesiones mineras que se han dado por parte del ministerio de minas y energía para explotar cal, petróleo, la concesión de los ríos y también el problemas que tenemos también es el estudio sísmico, que se está haciendo por las partes de los municipios del departamento del Meta, específicamente en el Castillo, Dorado, Cubarral, Lejanías, Vistahermosa, Macarena, pero también hay comunidades que se están organizando para prevenir el impacto ambiental que genera estas empresas.
- ¿Considera usted que hoy está amenazado el medio ambiente de esta región por la política minero – energético del presidente Santos?
Por supuesto que sí, porque de todas maneras la amenaza es grande por el daño que causa en el medio ambiente, pero también el daño que causa en el tema estructural, social, político, organizativo; los impactos que deja en la prostitución, en la drogadicción. En este sentido, estamos nosotros haciendo un ejercicio en coordinación departamental en el Meta con la mesa minero – energética, con la asociación ambiental de Guamal, que han estado haciendo resistencia por la incidencia petrolera con la plataforma Lorito 1, estamos coordinando con algunas instituciones a nivel regional como el Cabildo Verde y también coordinando para realizar una consulta popular en el municipio del Castillo para prevenir el impacto ambiental negativo.
Hemos estado con la mesa ambiental y participativa de esta región del municipio del Castillo, en donde tuvimos una reunión el pasado 28 de marzo con la asociación de Asojuntas, la mesa ambiental y participativa, la mesa minero – energética, los concejales del Dorado, concejales del Castillo, concejales de Cubarral, de Lejanías, de Granada, porque la idea que tenemos nosotros es cómo coordinar para un eventual hecho que se viene encima y no dejar que las petroleras incursionen en esta región y causen los mismos daños que han causado por ejemplo en Yopal y lo que va a suceder en la región de Gaitán con la explotación petrolera con Pacífic Rubiales.
- Las imágenes que hemos visto en la televisión sobre la muerte de por lo menos 20 mil especies animales de la zona de Casanare, ¿Es una consecuencia de la explotación minero – energético de las multinacionales y transnacionales?
Obviamente que estas muertes no son tan naturales porque eso es producto de la explotación petrolera y no es solamente de ahora. Acuérdese que existía de los Llanos Orientales y hoy en día, después de todos estos años, estamos mirando que digamos los efectos que se han venido presentando y es lo que nosotros no queremos. Y no solamente de los animales, también está el tema de la arborización, el tema hídrico y no son solamente 20 mil como dicen los medios de comunicación, la cantidad de animales que han fracasado allí, a causa de la sequía, se extiende a más de 30 mil.
- ¿Cuál es la realidad socio – económica de los habitantes de la zona?
En el momento que entran las petroleras, muchas comunidades se ilusionan. No alcanzan a analizar el daño que genera estas empresas. Por lo general estas regiones han sido agrícola y ganadera; entonces la vocación que tienen es solamente en ese sentido. No puede ser cierto que la cotiza sea cambiada por la bota, el sombrero por el casco, la camisa campesina por la camisa petrolera, los guantes, etc.
Pero hoy en día las comunidades se han visto afectadas y con lo que se ha venido presentando y mirando, han mirado de una manera diferente y es donde estamos incidiendo y las comunidades nos están llamando a hacer un trabajo articulado en contra de la explotación petrolera, en contra de la privatización y las concesiones mineras en esta región.
Por lo general lo que es Casanare, el departamento del Meta, la vocación siempre ha sido ganadera, siempre ha sido agrícola y hay otras regiones que son mucho más caso del bajo, alto y medio Ariari. Es una región donde toda la vida las comunidades han vivido en la agricultura y no de la minería.
- ¿Por qué una región tan rica como es el Llano y todavía los campesinos no tienen ni siquiera letrina donde hacer las necesidades fisiológicas?
Este es un tema que desde las organizaciones agrarias y populares se ha venido analizando. Hablemos – por ejemplo – del departamento del Meta, que es uno de los departamentos donde ha existido más corrupción. Aquí, se pelean las curules, se pelean los cargos, compran conciencias y toda la plata que han de invertir en el tema de inversión social, como la educación, agua potable, vías de penetración, vías terciarias, se invierten en corrupción digamos, a la compra de votos y compra de conciencias.
Por esa misma razón no encuentra usted en la finca un sanitario y si lo hay es porque se logra hacer a título personal, por iniciativa propia, pero no porque haya una política diseñada del gobierno regional o del gobierno departamental.
- ¿Cómo analiza usted el comportamiento del llanero?
En algunas partes, se han venido organizando por iniciativa propia. Últimamente se han visto y reacciones de los campesinos, diríamos la insurrección campesina a partir de la movilización, la marcha, los encuentros. Por ejemplo como la mesa cívica agraria y popular del oriente colombiano, en donde convergen todas las organizaciones agrarias de estas regiones y se le viene organizando para exigir sus derechos como campesinos y también resultó lo del paro.
El paro fue un impacto que se generó en el departamento del Meta en donde prácticamente se bloquearon las vías, pero también se instaló una mesa interregional con el Meta, Guaviare y el Guainía para que se hiciera incidencia en las exigencias de lo que tiene que ver con infraestructura, la nacionalización del petróleo, el tema de la vivienda, el tema de los créditos agrarios, la protección del medio ambiente y una serie de cosas que incluso, el gobierno aún no ha cumplido.
- ¿Qué expectativas reales tiene el pueblo común y corriente del llano sobre los diálogos de paz que se vienen desarrollando en la Habana (Cuba)?
quién se construye la paz? ¿Por qué están solamente las dos partes sentadas en la mesa de negociación?
En el Meta – por ejemplo – se han hecho varias actividades frente al tema de los diálogos de paz de la Habana; se realizó el encuentro de víctimas que convocaba la comisión de cámara y senado, se realizó también el encuentro de participación en política y la gente lo que fundamentalmente se pregunta es por qué las víctimas del conflicto no están allí. Y se responden: Simple y llanamente porque las víctimas es una parte muy débil de poder organizar para que participen directamente. Pero lo que sí esperan y aspiran es tener una buena incidencia las cien propuestas que hay y algunas de ellas se cumplan.
Pero la gente es muy renuente. La gente del común, de la calle, del corrillo es muy renuente y prácticamente ha perdido la fe con todo los procesos que se han venido adelantando anteriormente como lo de Casa Verde, lo de San Vicente del Caguán, entre otros procesos de paz que se han adelantado con la insurgencia y el gobierno porque unos dicen que el gobierno no cumple, otros dicen que la insurgencia tampoco cumple. Pero, nosotros hemos invitado a que hagamos tertulias y hablemos sobre el tema de la paz, quienes somos los que tenemos que incidir en la construcción de la paz partiendo del surgimiento de propuestas que nazcan desde las comunidades y desde las organizaciones sociales y populares, étnicas, afros e indígenas.
- A propósito, ¿Cómo va el proceso de unidad de las izquierdas en esta extensa región del país?
A nivel del departamento del Meta y hablando de la Orinoquía, hay un proceso muy disperso; solamente nos encontramos en momentos coyunturales pero realmente no se mantiene, digamos, una dinámica, que fortalezca el proceso de unidad, de la izquierda y de los sectores sociales y populares, o llámese organizaciones campesinas agrarias.
Sí hemos querido sentarnos con algunos sectores que allí inciden. Por ejemplo, el Moir, el Polo Democrático Alternativo, Progresistas, Marcha Patriótica, las asociaciones campesinas, la Unión Patriótica, el Partido Comunista.
Hemos tratado de inculcar que se hace necesario converger en una mesa de negociación entre nosotros mismos para haber qué pensamos y qué hacemos por este departamento y por esta región donde viene siendo tan atropellada por las multinacionales, por la violencia durante tantos años, sobre todo durante la época de auge de la Unión Patriótica.
- ¿Tienen claro entonces que la unidad es el camino para hacer resistencia al gobierno déspota de Juan Manuel Santos?
Quienes decimos que somos organizaciones sociales y que pensamos desde la izquierda, si no hacemos un proyecto de unidad programático, llámese desde la izquierda o con sectores de centro izquierda. Pero, insisto: Tiene que ser un proyecto programático donde todos nos sintamos recogidos, donde nos respetemos, donde verdaderamente hablemos de unidad, unidad programática y duradera.
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