Camarada Epolidoro Laverde Hasta la victoria siempre. Foto internet
Por Nelson Lombana Silva
La noticia de la muerte del camarada Epolidoro Laverde en el municipio de Cajamarca (Tolima), antier y sepultado ayer, a las tres de la tarde en el cementerio de esta población, “Cristo Resucitado”, causó pesar en las filas veteranas del Partido Comunista y en sectores progresistas y democráticos con asiento en el departamento de Tolima. La figura egregia del líder campesino y popular dejó honda huella, por su perseverancia en la lucha y la claridad política. Muy temprano se vinculó a las filas del Partido Comunista apoyando los diversos procesos unitarios en los cuales ha participado activamente los comunistas. No actuaba a medias tintas, su liderazgo cristalino y puro, era de frente, sin rodeos. Bien podría decirse que era un cuadro integral y clásico, ordenado, disciplinado y honesto.