Muere papá de dirigente comunista tolimense

Jorge Arturo López Núñez. Foto. Mario López

Por Nelson Lombana Silva

A la edad de 94 años, muere el papá del secretario general del Partido Comunista Colombiano, Regional Tolima, se trata de Jorge Arturo López Núñez. El deceso se produce en el municipio de Fusagasugá (Cundinamarca), el 27 de marzo, hacia las dos de la tarde, aproximadamente, cuando le sobrevino paro cardiaco fulminante. Fue cremado en el municipio de Girardot, también Cundinamarca, un día después, y sus cenizas próximamente reposarán en la ciudad de Ibagué.

Había nacido en el municipio de Cocuy (Boyacá), siendo sus padres: Rogelio López Sandoval y Margarita Núñez. Estaba casado con Evangelina Carrero, de cuya unión hubo varios hijos e hijas, entre ellos, el camarada Danilo López Carrero. Evangelina murió bastante joven, hace más de 30 años, le comentó Danilo López Carrero, a la página web: www.pacocol.org.

El camarada Danilo, recuerda a su padre, como una “buena persona, sumisa, religiosa y servicial, que mantenía las mejores relaciones con sus vecinos”. Agrega: “Era un trabajador de sol a sol, extremadamente sumiso a los patronos. Sus dificultades siempre las dejaba en manos de Dios. Yo heredé de él, su vocación por el trabajo, no así su extrema sumisión. Desde muy niño me rebelé contra la explotación, la forma como los patronos explotaban a mi padre y su religiosidad extrema”.

“Siente uno de todas maneras un vacío grande al no tener una persona que lo vio nacer, crecer y luchar. De todas maneras, el ciclo biológico es así. Supo sobreponerse a la cruda violencia con motivo de la muerte de Gaitán y luchar para levantarnos. Hoy le tocó a él, mañana nos tocará a nosotros”, subrayó el dirigente comunista del departamento de Tolima.

El Partido Comunista Colombiano, Local Ibagué, expresa públicamente la solidaridad al camarada Danilo López Carrero, y por su intermedio a toda su familia, por el fallecimiento de su señor padre, el compañero Jorge Arturo López Núñez. Destaca en él su vocación por arar la tierra sin las mínimas garantías del Estado. Fue un verdadero héroe anónimo del campo colombiano. “Si la humanidad fuera más justa – dijo Fidel Castro Ruz – erigiría más monumentos a los héroes del trabajo que a los héroes de la guerra”. 

¡Paz en su última morada!