jueves, 23 de noviembre de 2023

“Vamos a estar más en la calle que en el recinto”: Rodrigo Andrés Zambrano Gómez


 Por Agamenón

El concejal ibaguereño, electo el pasado 29 de octubre, es del municipio de Anzoátegui (Tolima), se trata de Rodrigo Andrés Zambrano Gómez. Además, es el más joven con escasamente 27 años de edad e hijo de Rodrigo Zambrano Camargo y Consuelo Gómez, una familia honesta y emprendedora en este municipio cordillerano, hoy radicada en la capital musical de Colombia, Ibagué.

Desde niño abrazó con donaire la política. Su liderazgo se puso a prueba desde el colegio al ser elegido personero. Se preparó para ello. Estudió abogacía en la universidad Cooperativa, especialista en gobierno y gestión pública en la universidad Javeriana. Es catedrático universitario.

Fue apoyado por diversas fuerzas políticas, entre ellas, el Partido Comunista. Define la política como “la posibilidad de servirle a la gente”. Su accionar en el concejo girará en tres aspectos centrales: La transparencia, la defensa del medio ambiente y las oportunidades. Además, la paz, la defensa de los Derechos Humanos y el derecho que tiene la ciudadanía de protestar.

Está dispuesto a trabajar las 24 horas. Señala: “Vamos a estar más en la calle que en la oficina”. Sus aspiraciones no son eternizarse en el concejo municipal, sueña con nuevos espacios fruto del trabajo y el contacto directo con las comunidades ibaguereñas. “Vamos a luchar por tener la ciudadanía a nuestro lado”, indica enfáticamente.

Dijo también que ya tiene varias iniciativas para presentar y, aunque se declara de oposición, ésta no será ciega, pues estará dispuesto a apoyar las iniciativas que beneficien a la ciudad y sean ejecutadas con transparencia y honestidad.

Admira la gestión del presidente Gustavo Petro, considerando que las Reformas que propone son útiles para el pueblo colombiano. No se alineará con ningún clan y siempre mantendrá en comunicación con las comunidades de los barrios y de las veredas de este municipio.

La entrevista completa es la siguiente:     

-         ¿Cómo hizo usted para llegar a estos avatares tan complejos de la política?

Este tema de la política me gusta y me apasiona desde que estaba muy niño. Desde ahí comencé a sentir gusto por el quehacer político; comenzó cuando me eligieron personero de mi colegio, me gustaba ese escenario de representatividad, de liderazgo, de ayuda. Me dije: Esto es lo que me gusta, esto es lo mío. Me dediqué en la vida a aprender de estos quehaceres del liderazgo y enfocarlo en los escenarios públicos y políticos.

Desde que salí del colegio lo enfoqué en querer participar de estos espacios y de estos escenarios políticos a tal punto de hoy convertirme en concejal de la ciudad de Ibagué, del concejal más joven que tiene la ciudad en la actualidad. Con muchos obstáculos, pero, sobre todo con mucho amor y convicción de que sí es posible hacer política sin comprar un solo voto.

Hoy, que ya somos concejales, hemos vuelto a la calle a entregar volantes de agradecimientos, a decirle a la gente que aquí estamos de frente y presente para seguir trabajando.

-         En esas condiciones, ¿Cómo define usted la política? ¿Qué es política?

Veo la política como la posibilidad de servirle a la gente. Hay muchas formas de servirles a las personas. Se puede servir desde las fundaciones, desde el quehacer social, empresarial, académico. Pero, sin embargo, pienso que la política es el escenario más poderoso, porque es allí donde se toman las decisiones más importantes de la sociedad.

Es por eso que yo decido servirle a la gente desde estos espacios, de los espacios políticos, porque es allí donde se están tomando las principales decisiones y donde podríamos de alguna manera influir de manera positiva en la vida de la gente y de nuestro entorno, sobre todo por algo fundamental, porque quienes han hecho creer a la gente que están en política, pero en realidad no son políticos, sino politiqueros, pues se han encargado de dinamitar la confianza, se han encargado de que la gente ya no crea en estos espacios, no crean en estos escenarios y, hoy nosotros quienes estamos empezando a asomar la cabeza en la política, tenemos ese reto de recuperar esa confianza perdida y decirle a la ciudadanía que la única forma que sea diferente, no es desde la indiferencia, sino desde la posibilidad de participar y hacernos elegir también.

-         Se afirma también que la política es fuerza, es poder. ¿Está dispuesto a ser esa fuerza para hacer de la política servicio a la comunidad?

Sí, totalmente. Nosotros nos estamos preparando con vocación de poder. Queremos estar en otros espacios. Valoramos mucho estar en el concejo municipal, pero lo vemos como la posibilidad de visibilizar nuestro trabajo, nuestra capacidad de trabajo, de influencia en las cosas buenas para la gente y estar en otros espacios en los que podamos de manera positiva influir más en las decisiones que se están tomando y afectando la ciudadanía. Queremos nosotros estar allí. Entonces, sí tenemos vocación de poder y hoy nos estamos preparando para estar en esos espacios donde podamos asumir con mucha responsabilidad la posibilidad de influir de manera determinante en el futuro de los presentes y de las futuras generaciones.

-         ¿Qué proyecta hacer una vez se posesione como concejal?

Nosotros ya iniciamos el trabajo. Sin posesionarnos ya estamos recorriendo las calles y nuestra principal apuesta es empezar a recuperar esas confianzas. Hoy tenemos las primeras acciones que es salir a las calles a hablar con la gente y presentarme como su concejal y agradecerle. Ya cuando estemos en el concejo municipal es eso lo que vamos a seguir haciendo. Ya estamos preparando unas iniciativas normativas de cara a temas ambientales, educativos, juveniles, de oportunidades, de transparencia. Si bien es cierto nuestro rol va a ser un rol de oposición a la administración municipal, pues también va a ser una oposición profundamente propositiva. Vamos a garantizarle a la ciudadanía que vamos a ser unos vigilantes, veedores y defensores de los recursos públicos del municipio y que los principales proyectos estratégicos de la ciudad, efectivamente, se ejecuten, se hagan, revisen, pero que no se nos roben la plata.

Segundo, vamos a ser unos garantes de la participación de la comunidad en las discusiones del concejo municipal. Que el concejo municipal no discuta únicamente la agenda de la alcaldesa, sino que discuta también la agenda que proponga la ciudadanía.

Tercero, vamos a ser muy propositivos. Vamos a plantear nuestra visión de ciudad, la vamos a plantear en el concejo municipal, no para que se queden en simples discusiones y pronunciamientos, sino que a través de nuestras herramientas jurídicas y otras competencias en el rol de ser concejal, pues puedan tener, efectivamente, unos resultados que impacten positivamente en la gente.

-         ¿Está preparado para hacer oposición en un escenario seguramente hostil, donde la alcaldesa seguramente contará con mayorías?

Nosotros creemos que hoy lo que nos debe mover es la ciudad, que esta ciudad sea cada vez mejor, que le garantice elementos básicos a la ciudadanía, que todavía no se ha logrado garantizar como el agua, la protección de los derechos humanos, la paz. Estas apuestas, justamente, es la que vamos a llevar al concejo municipal. Nosotros vemos que si hay cosas que debemos reconocer que se están haciendo bien, sin titubear lo vamos a apoyar, pero si vemos que hay cosas que, efectivamente, no se están haciendo bien, pues también lo vamos a denunciar, independientemente de las mayorías que puedan existir o no en la dinámica del concejo municipal. Nuestra labor no se va a ver perjudicada porque seamos minoría. Nuestros principios no son negociables, tampoco va a ser negociable la dictadura de las mayorías. Vamos a representar lo que más de tres mil personas hoy quieren, pero, sobre todo, lo que la ciudadanía puede estar depositando en nuestro proceso en el concejo municipal. Esa será la consigna que vamos a llevar allá. Nuestra acción no va a ser simplemente de pronunciamiento, que es lo que muchas veces pasa, van al concejo y solo se pronuncian. Se terminó la sesión y se terminó todo. Nosotros queremos trascender. Si es necesario hacer denuncias, pero no solamente públicas, sino ir a las instancias de los órganos de control en la ciudad de Ibagué. Vamos a ser garantes de que esos procesos, efectivamente, se cumplan a cabalidad, que si se debe responsabilizar fiscal, penal a algún funcionario, pues, que se haga. Esa va a ser nuestra labor.

-         Generalmente los ganadores desaparecen de sus electores y hasta la próxima campaña. En su caso, ¿Cuál va a ser su postura?

Nosotros vamos a hacer que nos identifiquemos por nuestro profundo acercamiento con la gente, con las comunidades. Todas las iniciativas que estamos preparando vamos a legitimarlas de alguna manera el próximo año, en enero, en visitas a las comunidades para poder escuchar sus percepciones, sus sentires y de alguna forma construirlas a partir de esto. Vamos a seguir en esa misma dinámica, en estar más en la calle que en el recinto, estar en los barrios, en las veredas, en los corregimientos, en los semáforos, en las universidades, dialogando constantemente con la gente, interpretando la ciudadanía, su problemática y mirando cómo desde el concejo se puede resolver dichas inquietudes. Nos vamos a caracterizar en ser profundamente participativos, en velar por la transparencia y en los procesos internos del concejo como de la alcaldía municipal, pero sobre todo mirando hacer un trabajo histórico en beneficio de la gente.

-         ¿Cuáles son los temas centrales que abordará en las primeras de cambio como concejal de Ibagué?

Vamos a tener unas líneas que básicamente se resumen en tres: Primero, la transparencia, no vamos a permitir que se roben la plata de los ibaguereños, vamos a ser garantes, veedores, de todos los procesos de contratación pública que se esté llevando a cabo en la administración municipal. Será lucha frontal contra la corrupción.

Segundo, vamos a velar para que este municipio empiece a entender qué es una dinámica ambiental, vamos a encargarnos de ser defensores del ambiente en el municipio de Ibagué. Ya tenemos preparados unos proyectos de acuerdo que protejan los cerros noroccidentales de la ciudad. Son temas que no son tan conocidos en la ciudadanía, pero que está pasando y en el futuro nos puede afectar. La agenda ambiental es muy fuerte, muy robusta.

Tercero, el tema de las oportunidades. Ibagué, hoy, prácticamente, para tener oportunidades tiene que hacer parte de una “rosca”. Eso no puede ser así. Necesitamos fortalecer la meritocracia en el municipio, necesitamos potenciar la necesidad de tener una ciudad universitaria, pero también conjurar el desempleo, pues Ibagué es la segunda ciudad con más desempleo en Ibagué y la primera en desempleo juvenil.

Nuestro enfoque va a estar bien acentuado en esas tres líneas transversales: El ambiente, la transparencia y las oportunidades. También la lucha por la paz y la defensa de los derechos humanos, respeto por el derecho de la comunidad a protestar y manifestarse.

-         ¿Qué opina usted del gobierno nacional de Gustavo Petro y Francia Márquez?

Es un gobierno bien intencionado, es un gobierno que está cumpliendo lo que prometió y es cómo logra resolver muchas de las inequidades, de las desigualdades que hay en nuestro país, por ejemplo, desde el punto de vista laboral, es una reforma que busca cómo salvaguardar los derechos de los trabajadores, algo básico y es que se reconozca dominicales, horas extras; pero también que el día termine a las seis de la tarde y no a las diez de la noche. Se reconozca las extras y el recargo nocturno. Las reformas que pretende este gobierno son reformas bien intencionadas, pensadas en la gente. Seguramente, tenemos que seguir rodeándolas para que tenga la contundencia de salir adelante. El reto es rodear al gobierno para que llegue a feliz término estas iniciativas.

Se afirma que el Tolima e Ibagué están gobernados por clanes, mafias. ¿Se va a alinear a un clan? ¿Qué posición va a tomar?

Yo también siento y creo que el departamento e Ibagué están gobernados por clanes políticos: El clan Barreto y el clan Hurtado, que se ha consolidado con la llegada de Aranda a la alcaldía. Esos clanes se convierten en empresas politiqueras, en empresas que comienzan a repartirse el Estado como si fuera una torta. Una partecita para aquí y una partecita para allá. Así es que consolidan el poder.

Nosotros no nos vamos a alinear con esas prácticas. Nuestra voz va a ser una voz disonante ante ese tipo de prácticas. Pero, así como mucha gente no creía que llegaríamos al concejo porque no teníamos ese tipo de maquinarias, esos ríos de plata, demostramos que sí pudimos llegar sin acudir a esas formas tradicionales. Hoy, vamos a demostrar que es posible ser superior a esas mafias y a esos clanes politiqueros de la forma como nosotros vamos a hacer nuestra gestión dentro del concejo municipal de Ibagué. Vamos a estar apartados de ese tipo de prácticas, vamos a luchar por tener a la ciudadanía a nuestro lado. Es el gran reto.

-         Hacer oposición en Colombia es un peligro inminente. Consciente de ello, ¿Persistirá en esta lucha?

Sí, sí. Siento que este es mi propósito de vida. Seré un defensor hasta el último día de mis días de estas causas, de mis principios…que en algún momento me recuerden justamente por la lucha que hemos dado sin titubear y sin doblegar los principios… Sería el mejor legado que le podría dejar a las futuras generaciones. Conmigo hay personas que sentimos, nos duele lo que sucede, nuestro sueño es que sea un lugar mejor para vivir, un lugar donde no nos nieguen nuestros derechos. Estamos dispuestos a asumir ese tipo de riesgos.

-         ¿Qué espera de las personas que con su voto lo ungieron como concejal de Ibagué?

Que me exijan muchísimo. Estamos preparados para estar a la altura de sus exigencias y a la exigencia de la demás gente. Fueron 3070 personas que confiaron en este proyecto. Sin embargo, soy concejal de todos los ibaguereños. Le solicitaría a toda la ciudadanía, especialmente a los que apoyaron esta iniciativa, que me acompañen en esta gestión, que me exijan, porque estamos al servicio de todos y todas. Los servidores públicos estamos para servir y no para ser servidos. Mucho acompañamiento, porque será una labor ardua, difícil, pero muy apasionante. 

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