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| Una cintilla negra indica que la clínica Minerva ha "muerto". Foto Nelosi |
Después de 60 años de prestar servicio a la salud de los tolimenses e ibaguereños, la clínica Minerva de la ciudad de Ibagué (Tolima) ha cerrado sus puertas. Una deuda que supera los $17 mil millones de pesos de las EPS y la ausencia de Estado, determinaron el cierre inexorable de este centro asistencial.
Son los efectos de la ley 100 de 1994, la gran obra del ex presidente Álvaro Uribe Vélez y la clase dirigente que entregaron el país a la infernal y deshumanizada dictadura del neoliberalismo. La salud mercancía. Solo queda un paciente por Caprecom que nadie se quiere hacer cargo de él porque saben que esta EPS, como todas las demás, no paga y debe en todas partes.
Además, se le está adeudando dos meses de salario a los empleados médicos y paramédicos, lo mismo que las cesantías del año pasado. Son 270 empleados que hoy han quedado en la calle. Esta era una de las clínicas mejor dotadas en la ciudad musical de Colombia, ubicada en el centro de la ciudad, a una cuadra de la gobernación del Tolima.
Según el enfermero Diego Fernando Rodríguez, ni el alcalde, ni el gobernador se han dado por enterado del terrible suceso. Al parecer, hay un silencio sepulcral, una indiferencia total. Los medios de comunicación informan pero más con tinte sensacionalista porque no profundizan sobre las causas reales del hecho que hoy privan a una ciudad de casi 600 mil habitantes y un departamento de un millón 200 mil habitantes de la tradicional clínica Minerva.
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| Movilización por las principales calles de algunos de los trabajadores |
Ayer hubo una débil movilización por las principales calles de algunos de los trabajadores, quienes viven su propio drama sin la solidaridad sólida como debiera ser. Lo irónico es que a escasos metros del parque Manuel Murillo Todo, donde se desarrollaba el plantón, los politiqueros de oficio exponían supuestamente sus propuestas sobre educación en el caso de salir elegido alcalde el 25 de octubre. Promesas y más promesas.
Esto se da porque la comunidad cree ciegamente aún que una cosa es la politiquería y la otra la problemática socio económica. Cree que no hay una relación íntima. Quizá desconoce que la situación dramática de la clínica Minerva es precisamente producto de decisiones políticas tomadas en el parlamento por los mismos que cínicamente hoy salen de sus madrigueras a engañar incautos, a prometer el oro y el moro sin sonrojarse.
García Orjuela, Luis Humberto Gómez Gallo, Mauricio Jaramillo, Pompilio Avendaño, el creador de las avenidas fantasmas en Ibagué, son entre otros los responsables directos, porque fueron ellos que le dieron vía libre al neoliberalismo más salvaje y brutal en Colombia desde el Parlamento.
Son ellos, entre otros, los responsables del genocidio contra la Unión Patriótica y el Partido Comunista y son ellos los que ha condenado a Colombia a más de 50 años de cruda violencia. Sin embargo, siguen ambicionando el poder y siguen posando de buenas personas, de hombres y prohombres.
La página web: www.pacocol.org entrevistó al enfermero Diego Fernando Rodríguez, quien confirma la noticia del cierre de la clínica Minerva:
- ¿Cuál es la problemática de la clínica Minera de la ciudad de Ibagué (Tolima)?
En este momento la clínica Minerva viene pasando por una crisis que la llevó prácticamente al cierre total de todos sus servicios. El Estado y las EPS, les adeudan aproximadamente $17 mil millones de pesos, a los empleados nos están debiendo dos meses de salarios y no han cancelado tampoco lo que corresponde del año pasado de las cesantías.
Todo esto es debido al no pago de las EPS que son las que nos tienen en quiebra. Nosotros estamos exigiendo que las EPS por lo menos paguen lo que están adeudando a la clínica y sumado a eso que el Estado dé una solución definitiva, que no dé más pañitos de agua tibia, porque el hecho de inyectar un dinero no es la solución, es un paño de agua tibia que se va a ver reflejado en una recaía a futuro próximo.
El motivo de nuestra manifestación es exigir nuestros derechos como trabajadores, como seres humanos que somos. Es más: No solamente nuestros derechos, sino de toda la ciudadanía ibaguereña y tolimense que se benefician de los servicios de la clínica Minerva.
- ¿Cuántos trabajadores están atravesando esta dramática situación?
Son aproximadamente 270 empleados de la clínica Minerva, muchos de los cuales dependen exclusivamente de este trabajo.
- Esta es una de las clínicas más tradicionales de la ciudad de Ibagué. ¿Qué nos puede decir de ella?
La clínica Minerva tiene más de 60 años de trayectoria. Es una clínica que ha venido creciendo de manera exponencial, ofreciendo múltiples servicios de salud a la ciudadanía.
Es una clínica que empezó con muy pocos empleados y fue creciendo progresivamente hasta donde estamos hoy, como lo podrán notar los diferentes medios de comunicación visuales, se puede evidenciar el crecimiento físico que ha tenido la clínica y sumado a eso la variedad de servicios y la calidad de servicios que ofrecíamos.
- ¿Cuáles servicios prestaba la clínica Minerva?
En este momento no se está prestando ningún servicio. Tenemos dos unidades de cuidados intensivos, una coronaria y la otra cuidado crítico mixta; se cuenta con servicio de quirófano, con hospitalización, primero y segundo piso, teníamos servicios de urgencias. Todos los servicios están cerrados en estos momentos, solamente hay un paciente y es de Caprecom, que es una de las EPS que debe no solamente a la clínica Minerva, sino a múltiples entidades de salud en el país. Por el solo hecho del paciente pertenecer a esta EPS, en ningún lado lo quieren recibir.
- ¿Con cuántas camas disponía esta clínica?
La capacidad instalada de la clínica Minerva es muy amplia, para empezar se cuenta con 25 camas de unidad de cuidados intensivos, más de 30 camas de hospitalización y los servicios de quirófano, tiene dos salas de quirófano muy bien equipadas, salas con la mejor tecnología, sumado a eso, los servicios de cardiología, la capacidad instalada para servicios de urgencias era aproximadamente de unos 20 a 25 pacientes.
- ¿Cómo han reaccionado la sociedad ibaguereña y los medios de comunicación?
Desafortunadamente lo que percibimos es que a muchas personas de nuestra sociedad, les es indiferente la situación de la clínica Minerva. Pareciera que no se dieran cuenta que en algún momento van a necesitar del servicio.
Los medios de comunicación, ellos sí han estado muy al tanto de la situación de la clínica. Afortunadamente y gracias a Dios, por lo menos en el país ya sabe la situación por la que está pasando la clínica Minerva y sumado a eso la situación de todo los empleados de la institución.
- ¿Qué han dicho el alcalde y el gobernador sobre este terrible acontecimiento?
En realidad prima el silencio administrativo por parte de los entes gubernamentales. No ha habido un pronunciamiento claro o por lo menos que den la cara para enfrentar los errores que se han cometido.
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