Movilización popular para sacar al fiscal Francisco Barbosa

Fiscal general de la Nación, Francisco Barbosa. Foto: Internet

 Por Agamenón

Las maniobras peligrosas que viene haciendo la Corte Suprema de Justicia para prolongar el mandato espurio del fiscal general de la Nación, Francisco Barbosa, se debe contrarrestar con la movilización popular del pueblo colombiano. El pueblo en su sana sabiduría y poder que encarna, no puede quedarse cruzado de brazos, observando los acontecimientos desconcertantes desde las gradas. Debe asumir una postura consecuente con el momento histórico que está viviendo el país y actuar antes de que sea demasiado tarde.

No hay que ser abogado o jurista para comprender la postura antipatriótica de la Corte Suprema de Justicia de prestarse para que este falso fiscal general de la nación, Francisco Barbosa, siga atornillado en el poder cometiendo toda clase de despropósitos que van en contra del Derecho y de la misma Soberanía Nacional. Hay que romper la pasividad y asumir una posición consecuente por cuanto el pueblo es soberano y autónomo para decidir el rumbo de la nación.

Como se ha venido denunciando ampliamente este fiscal es un monigote del uribismo, en general de la derecha y extrema derecha, cuya misión es ocultar a los corruptos de cuello blanco e impedir que se investigue y se haga justicia. Su tétrica misión es esa: Que los criminales sigan robando y delinquiendo y los inocentes continúen en las mazmorras del régimen o cuando más muertos o desaparecidos.

Este maniático personaje de lo más atrasado que hay en el país, se empecina en alimentar un golpe de Estado, va a los Estados Unidos a recibir seguramente órdenes para enrarecer aún más la situación de Colombia, buscando por todos los medios de que el presidente del cambio, Gustavo Petro Urrego, no siga adelante con su proceso de cambio que viene desarrollando con altura, decisión y coraje.    

Es la lucha de clases en todo su furor que el pueblo debe asimilar para asumir un posición clara y consecuente con su clase social. Aquí, no cabe términos medios y/o ambivalentes, menos la neutralidad o pensar ingenuamente que esta sucia burguesía está dispuesta a ceder en franca lid. Hará hasta lo imposible por no perder su reinado de corrupción, contando con sujetos de la peor calaña como Francisco Barbosa.

El Pacto Histórico, el poco sindicalismo consecuente y los diversos sectores democráticos, deben liderar la gran movilización en las calles y veredas de Colombia exigiéndole a la Corte Suprema de Justicia actuar en Derecho y no en función del criminal partido Centro Democrático que avala a esta criatura que se ha autoproclamado el más sabiondo del país.

Una gran movilización nacional e internacional que se encamine a la Corte Suprema de Justicia a exigirle que actúe conforme a la norma constitucional. No más triquiñuelas, no más trampas. Que estos togados digan con franqueza si están realmente con el país, o siguen de rodillas ante la vieja y sucia oligarquía que los nombró allí.  

Tenemos que rodear el proceso que ha iniciado el compañero presidente Petro, profundizarlo e incluso, radicalizarlo. Para ello, el constituyente primario debe actuar con decisión y claridad, ser protagonista de primer orden y actuar consecuentemente. Manos a la obra. Hay que fijar fecha y hora cero.