El Maestro Calarcá: “Mis primeros 90 años”

 

Foto archivo Nelosi

Por Nelson Lombana Silva

Con la sencillez propia de los grandes, el maestro Arlés Herrera, el Maestro Calarcá, ha esbozado a vuelo de mariposas amarillas, como diría Gabriel García Márquez, su retiro del semanario VOZ La verdad del pueblo: “Gesto que no lo considero un adiós, sino un hasta luego, porque sigo con el lápiz firme en mi mano para cuando ustedes requieran de mí alguna ilustración, retrato o caricatura”, señala uno de los mejores caricaturistas del país y del continente latinoamericano, que laboró sin descanso en el semanario comunista por más de sesenta años.

Señala sin ambages su vocación de lucha transitando con donaire sus primeros noventa años de vida. “Seguiremos en la brega por defender la vida como el valor más alto de la existencia humana”, subraya.

El maestro Calarcá es un comunista de tiempo completo. Está dispuesto a continuar en la lucha por cuanto considera cierta la afirmación del comandante Fidel Castro de que los comunistas no nos jubilamos, morimos en pie luchando por ideales comunes y nobles para la humanidad sin distinción de ninguna naturaleza.

Leer detenidamente su maravilloso texto publicado en las últimas horas, permite dimensionar la grandeza humana, política y artística del caricaturista nacido en la bella población quindiana, Calarcá.  En realidad, es un deleite:  

“Siempre espero anheloso que llegue el día miércoles para ver la edición de VOZ, para ver cuál es la orientación, solía decir siempre un compañero cuando abría sus páginas”.

“Esta vez al abrir la edición 3206, fue para mí una grata sorpresa y alegría por palabras del compañero director de VOZ, Zabier Hernández consignadas en la página VISIÓN”.

“La calidez por sus fraternas líneas no me queda otra cosa que decirle al camarada Zabier, a VOZ, y al consejo de redacción gracias a nombre de mi familia y mía por tan fraternal gesto. Gesto que no lo considero un adiós, sino un hasta luego, porque sigo con el lápiz firme en mi mano para cuando ustedes requieran de mí alguna ilustración, retrato, o caricatura”.

“Aprovecho este espacio para agradecerle al camarada Nelson Lombana Silva, quien hizo una cálida narrativa sobre mí modesto trabajo como comunista y obrero del quehacer artístico, trabajos que tengo que reconocer de manera autocrítica que no pocos trabajos tuvo fallas estéticas y conceptuales. También agradezco a mis colegas y camaradas que expresaron con cálidas palabras mi labor de 60 años en VOZ y como militante comunista 67 años”.

“Vivir 90 años, no sé si es una hazaña, o una tozudez, pero ha valido la pena porque me permitió ver desde el siglo XX acelerados cambios sociales, tecnológicos y culturales etc. También me ha tocado ver la miseria de la condición humana, sobre todo de quienes han manejado el mundo, estos que sin un asomo de humanidad descargaron la bomba atómica sobre la población civil de Hiroshima y Nagasaki, este crimen es apenas un episodio de un imperio iluminado por Dios, según ellos”.

“He sentido y lamento aún el derrumbe de la Unión Soviética, perdimos la humanidad trabajadora y quedamos a merced de la canalla capitalista señores de la guerra que sin ningún pudor despilfarran la riqueza que producen los trabajadores en la más aterradora y monstruosa   construcción de armas nucleares poniendo a la humanidad al borde del abismo.  Poco o nada se habla del creciente armamentismo, raro tanto silencio incluso desde la izquierda”.

“Vivir largo también hay tiempo para celebrar con alegría conquistas populares lideradas por comunistas. Pero al lado de la vida acecha la muerte, con tristeza a Colombia le ha tocado pasar por el dolor de ver como a miles de sus mejores hijos de la Unión Patriótica, fueron asesinados por orden de una casta ruin, cuya madrina ha sido la muerte, que no se inspira en lo bello, sino en lo más sórdido de su mentalidad, el crimen, el robo, la corrupción, la explotación, el saqueo y la mentira”.

“Hoy, a mis primeros 90 años, tengo motivos para sentir alegrías: una maravillosa familia vinculada al cambio en el "país de la belleza".

“Otro motivo de alegría haber tenido la oportunidad de ser un comunista, seguramente no el mejor militante, pero he procurado ser consecuente con lo que expreso ante mi entorno social. Gran alegría de ver nuevos artistas de la caricatura exponiendo su arte en las páginas de VOZ, sobre todo que haya una caricaturista mujer, como "NANI", a la cual estimo y admiro profundamente”.

“Gracias compañeras y compañeros. seguiremos en la brega por defender la vida como el valor más alto de la existencia humana, por la defensa de los derechos de la naturaleza donde está incluida la humanidad”.

Un abrazo Calarcá