Tratamiento aguas residuales en el Cañón del Combeima

Foto: Nelosi

 Por Nelson Lombana Silva

Los principales líderes del Cañón del Combeima, se dieron cita en el corregimiento de Villa Restrepo, este 26 de agosto, con el fin de firmar acta de compromiso con la corporación autónoma regional del Tolima (Cortolima), para la construcción de obras encaminadas a tratar las aguas residuales, evitando de esta manera la contaminación del río Combeima y sus numerosos afluentes. Cincuenta familias resultaron beneficiadas. A la firma del acuerdo, asistieron las principales autoridades de Cortolima en cabeza de su directora, el guardián del Combeima, Ángel Alberto Lozano, lo mismo que el abogado y prestante comerciante, José Orlando Pérez.

La comunidad asistente, destacó la importancia de la preservación del medio ambiente, sobre todo de este cañón que es un pulmón no solo del departamento, sino del país, lo mismo, una estrella hídrica que surte del preciado líquido a la ciudad de Ibagué y numerosas familias ubicadas en la vera de la corriente hídrica.

“Me gusta cumplir lo que prometo”, dijo la directora de Cortolima. A la pregunta de por qué se hacen “tantas inversiones” en el cañón, la funcionaria, contestó: “Esto tiene muchísimas justificaciones, muchísimas razones. Uno: Este cañón surte el agua de Ibagué. Es imposible que como corporación no estemos acá cuidando y preservando lo más importante que tenemos que es el agua. Me he propuesto hacer muchas tareas en este cañón. Algunas las he adelantado, las otras las tengo pendiente, por completar”.

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Por su parte, el líder comunitario José Orlando Pérez, destacó el motivo del encuentro y el sentido de pertenencia de la comunidad, lo mismo el compromiso de los funcionarios públicos para desarrollar actividades en beneficio de la comunidad y del medio ambiente en su conjunto. “Me parece maravilloso, un acto de fe”, señaló. Dijo que Ibagué cuenta con 17 corregimientos, 144 veredas. De ellos, hay tres corregimientos y 32 veredas en el Cañón del Combeima. En el último censo de 2008, “éramos en total 10.600 personas, hoy calculo que hay conmigo 15.000 personas. Somos aproximadamente el 24 por ciento de las veredas y más o menos el 40 por ciento de la población. Pero, lo más importante, es que estamos en una zona que es un paraíso que lo escogí con mi esposa para vivir”.

Por su parte, el guardián del Combeima, Ángel Alberto Lozano, destacó la firma de los acuerdos, pidió a Cortolima más acción en la región y menos represión con las personas más humildes, de igual manera, pidió parar la construcción a gran escala que se ha disparado en los últimos años: “Son muy pocas las personas que dejan obras dignas de recordar. Persiguieron a mis hermanos campesinos quitándole una motosierra porque tumbaban un árbol. Sí, hay que tumbar muchos árboles, ¿Saben cuáles? El Eucalipto y el Pino, que no son de la región y que nos los impusieron Inderena y después Cortolima. Tenemos que tener memoria. Fueron árboles maderables para el servicio de la comunidad. Me tocó ir a pedir limosna con esos jurídicos vendidos de Cortolima. Se llevaron a un muchacho a la cárcel tres meses, el hijo de Plinio Arbeláez y qué problema con eso. Y resulta que por debajo del escritorio le estaban cobrando plata. Aquí, hay que decir las cosas, aquí no es lambonería y zalamería. Conmigo es directo”, señaló.

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Agregó: “Es como el cuento de la maquinaria: Por favor, tengan mecánicos responsables, no tengan esa gente que desvalija la maquinaria, una maquinaria que acaba de salir y a las dos semanas se dañó el repuesto. ¿Dónde están las regalías? ¿Por qué nosotros tenemos que poner plata para el combustible?”, le preguntó Ángel Alberto Lozano a la funcionaria de Cortolima.

La asamblea terminó después de las doce meridianos con la firma de los nueve convenios y el compromiso de comenzar las obras en la mayor brevedad posible. El primero en hacerlo fue Yeison Alvis, presidente de la junta de acción comunal de Villa Restrepo.