miércoles, 20 de abril de 2016

La misión histórica del Partido Comunista Colombiano

Por Nelson Lombana Silva

Los comunistas de la ciudad de Ibagué (Tolima) venimos preparando el seminario – taller de organización con la esperanza de contribuir al fortalecimiento de la unidad y el nivel ideológico y político para poder interpretar con más conciencia de clase y claridad científica la realidad histórica que estamos viviendo, siempre con la mentalidad transformadora, pues no se puede asumir una simple posición contemplativa. Hay que decir y hacer.



Para tal efecto, se ha propuesto un documento a manera de tesis, documento que oriente la discusión de los comunistas en la ciudad de Ibagué de la mejor manera, aportando elementos teóricos y prácticos en el marco del pensamiento marxista – leninista.


La tesis número 2, dice: “La actividad central del Partido Comunista Colombiano se inspira en la construcción de un nuevo poder de carácter popular, democrático, científico y humanista, en la perspectiva de garantizar la paz con justicia social, la democracia y los derechos humanos para todos y todas, sin privilegios de ninguna naturaleza”.


Esta tesis trata de determinar cuál es la misión del Partido Comunista Colombiano, cuál es su papel, su rol. Qué busca, qué lo anima. Es decir, cuál es su proyecto, su naturaleza y esencia. Mientras no tengamos claro esto, será muy difícil decir con plena conciencia de clase y conocimiento de causa: “Somos Comunistas de verdad”.


O sea, para poder decir con pureza y certeza somos Comunistas hay que tener dos elementos fundamentales: Conciencia de clase y conocimiento científico. Mientras no se tenga claro estos dos elementos estamos condenados a divagar o quizás a ser supremamente subjetivos. Recordemos que el comunismo es ciencia.


Así las cosas, un primer propósito del Partido es la construcción de un nuevo poder popular, democrático, científico y humanista. ¿Qué es el poder popular? ¿Qué es democracia? ¿Qué es la cientificidad? ¿Qué es el humanismo? Cada interrogante daría para llenar cuartillas en cantidades industriales. Se podría sentar cátedra, pero de eso no se trata en esta oportunidad. Más bien es utilizar el lenguaje más sencillo que nos permita hacernos entender, por cuanto la idea no es competir con los eruditos, sino llegar al pueblo, del cual nosotros hacemos parte. No es “descrestar” es orientar sin ningún rasgo de petulancia, reconociendo por supuesto nuestras limitaciones teóricas y prácticas.


La política es sinónimo de poder. Por lo tanto, el Poder es política. En Colombia, el Poder Político está en manos de los ricos (La burguesía) y lo que busca el Partido Comunista es que ese Poder Político esté en manos del pueblo (El Proletariado). Esa es la esencia de la lucha de los Comunistas: La construcción del Poder popular (Pueblo).


Este Poder Popular debe tener unas características o particularidades. Primera característica: Democrático. ¿Qué significa ser democrático? La palabra democrático viene de la palabra Democracia y Democracia es una palabra de origen griego que se puede descomponer en dos partes: Demos = Pueblo y Cracia = Gobierno. Democracia sería entonces el gobierno del pueblo. La democracia se orienta por la mayoría. Y la mayoría de los colombianos somos pueblo. Luego, es el pueblo el que debería estar gobernando en Colombia, pero no es así, viene gobernando la minoría, la burguesía u oligarquía como la llamaba Jorge Eliécer Gaitán Ayala. 


Una segunda característica que debe tener el Poder Popular: Científico. Los Comunistas nos guiamos por la Ciencia, no por la especulación. Y, ¿Qué significa ser científico? Todo concepto es científico mientras tanto se pueda demostrar a través de la práctica. El Poder Popular que proponen los Comunistas debe descansar en la ciencia. La ciencia se expresa en las más distintas áreas del conocimiento: Antropología, Sociología, Historia, Biología, Política, Economía, etc, etc. Luego, no es fortuito que el Comunista siempre esté preocupado por el conocimiento, por la ciencia, en consecuencia, estudiando y practicando, permanentemente por cuanto el conocimiento es infinito en cualquier área del conocimiento.


Una tercera característica que debe tener el Poder Popular que plantean los Comunistas: El humanismo.  El centro de todo, lo más importante debe ser el ser humano en función social. Por lo tanto, el Poder Popular debe tener como centro de preocupación el hombre en su conjunto. Elián, el niño cubano que fue secuestrado por los Estados Unidos movió a toda la isla y no descansó hasta que el pequeño no regresó a su patria sano y salvo. Mucha gente miró esto en Colombia como simple excentricidad de Fidel Castro. “Mientras en Colombia se mueren de hambre y frío miles de niños – dijo un parroquiano – Fidel mueve todo un país por un “chino”. ¡Qué tontada!” Nuestra respuesta fue la siguiente: “No es tontada. Tiene su lógica: En Cuba lo más importante es el ser humano, en Colombia el dinero. Por eso allá se moviliza todo un pueblo, mientras en acá los niños se fueren de física hambre. Prima el dinero sobre la dignidad humana”.


Así las cosas, el Poder Popular que plantean los Comunistas debe estar en esa dirección: Que prime la dignidad humana sobre la actividad económica. Solo así resulta posible acabar con la explotación del hombre por el hombre, la miseria, el desempleo y la falta de salud y educación para todos y todas.


También habla la tesis de “Garantizar la paz con justicia social”. ¿Qué significa paz con justicia social? La paz es producto de cambios a favor de las mayorías (Pueblo). No basta con decir: Quiero la paz, decreto la paz. Se hace necesario acompañar esas buenas intenciones de hechos concretos. La paz con hambre es imposible, la paz con impunidad es imposible, la paz con la imposición de la ley del más fuerte y del Talión es imposible, la paz sin educación, salud, techo, recreación, respeto del medio ambiente, etc es imposible. La paz con justicia social, consiste en erradicar las causas que dieron origen a la violencia. Así de sencillo. Implica el respeto a los derechos humanos.


El Comunista debe tener clara su misión política. No debe vacilar. Debe tener clara la película, como se suele decir coloquialmente.


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