El dirigente regional de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), seccional Tolima, Jonathan Varón Posada, considera que una forma concreta de superar en grado sumo la crisis que origina la política intervencionista de Estados Unidos en la hermana República Bolivariana de Venezuela, es profundizando las reformas y el Socialismo siglo XXI.
De igual manera, fortaleciendo el proyecto estratégico de unidad Latinoamericana diseñado por el comandante Hugo Rafael Chávez Frías y que dio origen a escenarios importantes como UNASUR, la CELAC, el Banco Sudamericano, etc.
Señala el líder sindical que el principal desafío de la clase trabajadora en este siglo XXI, es la lucha frontal contra el Neoliberalismo, sistema que se empecina en arrasar con todas las conquistas de los trabajadores y hacer desaparecer la lucha sindical.
Estas declaraciones fueron concedidas a la página web: www.pacocol.org, durante la conmemoración del día internacional de la clase obrera, el primero de mayo, en la ciudad de Ibagué (Tolima), durante el recorrido:
- Según su criterio, ¿Cuáles son los principales desafíos que tiene la clase trabajadora en el siglo XXI?
La clase trabajadora tiene una lucha frontal contra el Neoliberalismo. El Neoliberalismo trae consigo una consigna central: Quitarle las garantías laborales, de seguridad social y la posibilidad de tener derechos sindicales los trabajadores.
En mi opinión, el reto fundamental del movimiento obrero a nivel mundial y en el país, es hacerle frente al modelo Neoliberal, que permita que los trabajadores y las nuevas generaciones de jóvenes trabajadores, tengan derecho a sindicalizarse, derecho a la pensión, derecho a la seguridad social, derecho a estabilidad laboral. Hoy por hoy, es un privilegio tener un contrato de trabajo con plenas garantías.
- ¿Qué lectura hace usted del momento político que vive el continente Latinoamericano con la arremetida virulenta de Estados Unidos en los asuntos internos de los países?
Hay necesidad de hacer un contexto de la realidad Latinoamericana. Antes de que la derecha volviera con su arremetida de sus golpes “suaves”, de una intervención económica como en Venezuela, existían gobiernos democráticos y progresistas que le habían dado la posibilidad de avanzar al movimiento obrero en sus reivindicaciones y garantías laborales, en países como Ecuador, Brasil, Venezuela, Uruguay, en donde el movimiento progresista estaba en el poder y aún se mantienen algunos lugares, los trabajadores lograron conquistar mejoras a sus condiciones laborales, posibilidades de tener una pensión digna, una salud digna para él y su familia.
Así que, ante esta arremetida contra los derechos de los trabajadores por intermedio de estos gobiernos, se ha venido una afrenta, una persecución, una intervención económica y política hacia los gobiernos de Latinoamérica. Eso se ve reflejado hoy en lo que pasó en Venezuela y lo que está aconteciendo en toda Latinoamérica y que completamente rechazamos, porque nosotros promovemos y estamos a favor de la Soberanía Nacional de los pueblos, no vamos a permitir que Estados Unidos y su política injerencista intervenga en las decisiones del pueblo colombiano y las decisiones sobre todo en este momento del pueblo de la hermana república bolivariana de Venezuela. Ha demostrado dignamente que va a detener a como dé lugar, la injerencia de los Estados Unidos. Todas las intentonas que ha hecho contra Venezuela no han logrado triunfar. El 30 de abril, fue otro triunfo de la Revolución Bolivariana. Detuvo el golpe de Estado y va a mantener su proceso revolucionario.
- ¿Hay una arremetida del imperialismo de Estados Unidos o hay una crisis de la izquierda, los países democráticos y progresistas?
En primera instancia hay que decir que como todo proceso hay dificultades. En ese sentido, no podemos negar que en cualquier proceso político, cualquier proceso revolucionario, existan dificultades. Y, una de las dificultades complicadas y complejas del proceso revolucionario en Venezuela, es el tema económico. Y, es que no se ha decidido profundizar una política socialista, una política que permita eliminar esa dependencia de la renta petrolera. Cuando esto se termine, va lograr Venezuela y los procesos revolucionarios en Latinoamérica, la posibilidad de tener independencia de la política estadounidense.
Pero también existe una intervención económica sobre aquellos países que han decidido soberanamente aislarse de la política yanqui. Esto se manifiesta de varias formas: Una, en política de intervención económica que hace que la inflación en Venezuela sea difícil de controlar. También se ha generado un robo del erario público de Venezuela.
En Estados Unidos y en Inglaterra, embargaron las cuentas de la estatal petrolera PDVSA; eso demuestra que también hay una política injerencista en términos económicos. Pero también una política injerencista en términos políticos, autoproclamación de Guaidó y de inmediato el respaldo de distintos países que reciben las órdenes del imperio norteamericano, demuestra también que hay una política de intervención política hacia Venezuela por la contundencia de la Revolución y la defensa del pueblo bolivariano no han permitido avanzar esa intervención de Norteamérica en Latinoamérica y en Venezuela.
- ¿Eso quiere decir que la salida a la problemática de la hermana república bolivariana de Venezuela sería profundizando las reformas, el socialismo?
Claro que sí. Pero, también es logrando que los pueblos Latinoamericanos sigan ese proyecto de integración bolivariana que el comandante Chávez fundó como una de las expresiones de solidaridad y de unión Latinoamericana. Es decir, UNASUR, la CELAC, todas esas expresiones permitirán que las economías latinoamericanas unidas les hagan frente desde sus soberanías, desde sus dinámicas propias a las políticas económicas injerencistas de Estados Unidos.
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