jueves, 6 de mayo de 2021

Militarizada Colombia, el Paro Nacional sigue

Tanque del Ejército en las afueras de Bogotá el 4 de mayo de 2021. (Foto: AFP).

 Por Nelson Lombana Silva

En cumplimiento de la orden impartida por el matarife y narcotraficante número 82, Álvaro Uribe Vélez, las ciudades y pueblos de Colombia han sido militarizadas. Al decir del Secretario General del Partido Comunista Colombiano, Jaime Caicedo Turriago, hay una especie de golpe de estado, ante la ineptitud y cobardía del presidente Iván Duque Márquez. Ciudades como Cali (Valle del Cauca), se ha convertido en un verdadero campo de batalla de un pueblo inerme e indignado contra unas hordas criminales del militarismo más reaccionario y criminal. Las cifran hablan por sí solas. Se habla de por lo menos ocho asesinatos a manos de la policía, del Esmad y del ejército. Bien lo dijo Jorge Eliécer Gaitán: “El gobierno tiene la metralla homicida contra el pueblo y una temblorosa rodilla en tierra ante el oro americano”.

El llamado es urgente a la comunidad nacional e internacional en la dirección de que el gobierno desmilitarice las ciudades y brinde las garantías elementales a la protesta y la movilización del pueblo. El pueblo no es vándalo, vándalo la clase dominante que tiene sembrada en el pueblo la crisis más descomunal nunca registrada en esta nación de 50 millones de habitantes.

Hay una masacre en desarrollo en Colombia: 21 asesinatos, 208 heridos de gravedad, 503 detenidos arbitrariamente, decenas de desaparecidos, diez mujeres violadas por policías Esmad, agredidos defensores de Derechos Humanos y periodistas. Son las cifras que hasta ahora se manejan en las redes sociales.

Sin embargo, el Paro Nacional continúa con fuerza en todo el país, a pesar de no haber garantías. “No hay donde denunciar”, señala el senador Gustavo Bolívar, porque todos los organismos de control están bajo el dominio absoluto del Centro Democrático. La Fiscalía General de la Nación, la Procuraduría General de la República y la Defensoría del Pueblo, son cuotas burocráticas del ex senador y ex presidiario Álvaro Uribe Vélez.

La presión infame del gobierno nacional contra el pueblo exigiendo más contribución, sin tocar a la gran oligarquía, son órdenes expresas de organismos internacionales, especialmente la OCDE, el banco mundial y el fondo monetario internacional (FMI), con la cómplice indiferencia de la Organización de los Estados Americanos (OEA) y la misma organización mundial de las naciones unidas (ONU).

En esas condiciones, el Comando Nacional de Paro (CNP), ha instado a continuar con la protesta en todo el país, extremando las medidas de bioseguridad y de las hordas criminales del militarismo peligrosamente exacerbado en toda la nación.

El pliego básico que ha propuesta es el siguiente:

1.   Exigir garantías y libertades democráticas, constitucionales garantizando la movilización y la protesta.
2.   Desmilitarización de las ciudades, cese de las masacres y castigo ejemplar a los responsables de éstas.
3.   Desmonte del criminal Esmad.
4.   Retiro inmediato del proyecto 010 sobre la reforma a la salud y el fortalecimiento de una masiva      vacunación contra la Covid – 19.
5.   Renta básica por lo menos un salario mínimo legal vigente mensual.
6.   Defensa de la producción nacional (Agropecuaria, industrial, artesanal, campesina). En la década de los 90s, el país importaba 500 mil toneladas de alimentos, en la actualidad por lo menos 9 millones, gracias a los Tratados de Libre Comercio (TLC). Subsidio a las Pymes y empleo con derecho a una política que defienda la soberanía y seguridad alimentaria.
7.   Matrícula cero y no a la alternancia educativa.
8.   No discriminación de género, diversidad sexual y étnica.
9.   No privatizaciones y derogatoria del decreto 1174. Detener las erradicaciones forzadas de cultivos de uso ilícito y aspersiones aéreas con glifosato.

Son los puntos centrales que plantea el Comando Nacional de Paro, que hay que agitar en las concentraciones y movilizaciones que se vienen desarrollando en Colombia.

En esta lucha hay que destacar la decisión del pueblo, sobre todo la juventud. Ha puesto una dosis elevada de sacrificio. Eso hay que admirar y valorar. A la memoria de los caídos hay que continuar la lucha callejera, cada vez ojalá, más organizada, unitaria y combativa.

En Ibagué la protesta sigue en pie. Mientras redactamos esta nota, los camioneros y taxistas se mueven por la ciudad con entusiasmo y decisión. También se ha indicado que hoy será el funeral de Santiago Andrés Murillo, asesinado por un policía activo. Ya se conocen vídeos que dan cuenta de la forma infame como fue asesinado. Resulta repugnante e indignante que se mate la juventud con las armas de la república que el pueblo ha pagado con sus numerosos impuestos.

¡Viva el Paro Nacional!
¡Viva la unidad del pueblo!
¡Patria o muerte, venceremos!
Imagen. Tanque del Ejército en las afueras de Bogotá el 4 de mayo de 2021. (Foto: AFP).



Solidaridad con el camarada Fabián Hernández Martínez

 

(Declaración Pública)

En momento tan complejo que vive el país por obra y gracia del modelo neoliberal y las políticas antipopulares del títere gobierno uribista de Iván Duque Márquez, que se parece mucho al fascismo, resulta sumamente peligroso que se esté estigmatizando al compañero Fabián Hernández Martínez de ser “policía infiltrado” en las diversas movilizaciones que se vienen desarrollando en la ciudad de Ibagué, tal como lo ha denunciado en documento público la Juventud Comunista (Juco). Es un señalamiento sumamente peligroso e irresponsable, que el Partido Comunista Colombiano, Local Ibagué, rechaza contundentemente y solicita a los autores de esta campaña en las redes sociales, rectificar oportunamente.

El compañero Fabián Hernández Martínez es un dirigente social, sindical y político probado en la lucha y con profunda conciencia de clase que ha dedicado su vida a luchar por los cambios democráticos que necesita con urgencia el país. Se recuerda su lucha estudiantil en la universidad del Tolima, en el sindicato del Sena y en la lucha partidaria. Ojalá sea un error precipitado y no un plan siniestro de la inteligencia militar para estigmatizar al compañero y amigo de luchas y vigilias.

Ibagué, mayo 5 de 2021

Nelson Lombana Silva
Secretario General
Partido comunista colombiano, local Ibagué
Comité ejecutivo

No hay comentarios.:

Publicar un comentario