Por Nelson Lombana Silva
El Paro Nacional que ha cumplido un mes, se mantiene vigoroso, firme y combativo en el departamento de Tolima, muy especialmente en la ciudad de Ibagué. El pueblo tiene claro que la estrategia del gobierno nacional es dilatar, con el único propósito de minar la resistencia popular. Pero, hasta la presente ha tacado burro, porque la protesta continúa y con fuerza.
El pueblo le ha perdido el miedo a la criminalidad represiva del binomio estado-paraestado, especialmente el criminal Esmad. No ha dejado de luchar y expresar su indignación total contra este régimen corrupto, descompuesto y violento, que solo está listo a defender el gran capital, en detrimento del pueblo colombiano.
La juventud, especialmente, continúa al frente de la protesta con ímpetu descomunal, consciente que no tiene nada que perder con la protesta, pero en cambio sí mucho qué ganar.
La movilización comenzó ayer muy temprano en la ciudad de Ibagué (Tolima), en el marco de la convocatoria que hicieran el Comando Departamental de Paro y la Asamblea Popular. Cientos de personas se volcaron nuevamente a la calle. La emblemática calle quince fue bloqueada, lo mismo la calle 37 con carrera quinta. El magisterio se hizo presente en masa, gracias a delegaciones de los 47 municipios del departamento. Bajo un cálido sol, la multitud se desplazó a la calle 60, calle Santiago Murillo, donde se realizaron diversas actividades culturales y artísticas. Hasta altas horas de la noche la vía permaneció bloqueada.
El Paro Nacional sigue, mientras tanto, el presidentico Iván Duque Márquez, se desplazó a Cali a recrudecer la violencia militarista contra el pueblo. Siguiendo la hoja de ruta del matarife y narcotraficante número 82, Álvaro Uribe Vélez, el desprestigiado y débil presidente, no sabe hablar de paz y concertación. Su lenguaje es de violencia y de terror.
En realidad, el gobierno está jugando con candela. Su estrategia de dilatar una solución plausible es de doble filo y resulta supremamente peligrosa. Todo indica que el pueblo ya no come cuento, ni se amilana por las acciones criminales de los esbirros del régimen. Ayer, por ejemplo, fueron masacrados tres personas en la sultana del Valle, Cali. Sin embargo, la lucha no cede y, por el contrario, se consolida. Al decir de algunos hay una situación “pre o revolucionaria en Colombia”.
Hoy se desarrollará en la ciudad musical, la cuarta asamblea popular en las instalaciones de la concha acústica. Como quien dice: El Paro Nacional continúa con fuerza en Ibagué (Tolima).
El pueblo le ha perdido el miedo a la criminalidad represiva del binomio estado-paraestado, especialmente el criminal Esmad. No ha dejado de luchar y expresar su indignación total contra este régimen corrupto, descompuesto y violento, que solo está listo a defender el gran capital, en detrimento del pueblo colombiano.
La juventud, especialmente, continúa al frente de la protesta con ímpetu descomunal, consciente que no tiene nada que perder con la protesta, pero en cambio sí mucho qué ganar.
La movilización comenzó ayer muy temprano en la ciudad de Ibagué (Tolima), en el marco de la convocatoria que hicieran el Comando Departamental de Paro y la Asamblea Popular. Cientos de personas se volcaron nuevamente a la calle. La emblemática calle quince fue bloqueada, lo mismo la calle 37 con carrera quinta. El magisterio se hizo presente en masa, gracias a delegaciones de los 47 municipios del departamento. Bajo un cálido sol, la multitud se desplazó a la calle 60, calle Santiago Murillo, donde se realizaron diversas actividades culturales y artísticas. Hasta altas horas de la noche la vía permaneció bloqueada.
El Paro Nacional sigue, mientras tanto, el presidentico Iván Duque Márquez, se desplazó a Cali a recrudecer la violencia militarista contra el pueblo. Siguiendo la hoja de ruta del matarife y narcotraficante número 82, Álvaro Uribe Vélez, el desprestigiado y débil presidente, no sabe hablar de paz y concertación. Su lenguaje es de violencia y de terror.
En realidad, el gobierno está jugando con candela. Su estrategia de dilatar una solución plausible es de doble filo y resulta supremamente peligrosa. Todo indica que el pueblo ya no come cuento, ni se amilana por las acciones criminales de los esbirros del régimen. Ayer, por ejemplo, fueron masacrados tres personas en la sultana del Valle, Cali. Sin embargo, la lucha no cede y, por el contrario, se consolida. Al decir de algunos hay una situación “pre o revolucionaria en Colombia”.
Hoy se desarrollará en la ciudad musical, la cuarta asamblea popular en las instalaciones de la concha acústica. Como quien dice: El Paro Nacional continúa con fuerza en Ibagué (Tolima).
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