La campaña electoral en Colombia entra en la recta final. Los candidatos a las distintas corporaciones hacen sus últimas propuestas y llamados a la unidad o los acuerdos burocráticos de última hora.
La más reciente encuesta, en el caso de la alcaldía de Ibagué (Tolima), indica que las distancias entre uno y otro aspirante, son relativamente cortas. En esas condiciones, el candidato alternativo a este cargo, Hugo Ernesto Zárrate, señala que hay 100 mil ibaguereños que aún no han tomado posición clara y serían, eventualmente, los que inclinarían la balanza.
El dirigente político que aglutina lo más granado de la izquierda, sectores democráticos y progresistas, analizó los resultados de dicha encuesta: “Creo que lo más importante de esa encuesta es que 100.000 ibaguereños no se han decidido. Y, es muy importante que al decidirse lo hagan por propuestas que no estén manchadas por procesos penales, ni estén manchadas por incertidumbres de orden legal. Estoy absolutamente convencido que está decidiendo la semana entrante esos 100.000 ciudadanos. De ellos depende, optar por una buena propuesta”.
Lo que se ha visto y apreciado durante este debate electoral, es la cantidad de dinero en circulación en algunas campañas. Según Zárrate no ha sido suficiente porque el elector ha ido develando una especie de compra de la alcaldía. En palabras suyas: “Eso puede estar indicando que la gente al darse cuenta de candidatos que meten millones pesos, pues se están dando cuenta que esos candidatos son los que vienen haciendo corrupción o que la van a hacer al llegar a la administración porque tienen que recuperar esa plata”, dijo
Agregó: “En cambio, en el caso de nosotros que somos alternativos, la campaña la hemos hecho a pie, de puerta en puerta, sin grandes parafernalias de publicidad ni nada, no es solamente porque no tengamos los recursos, sino porque así lo tuviéramos consideramos que el verdadero ejercicio de la actividad humana política, es resolver los problemas de la sociedad y no simple actividad mercantil”.
¿Qué podría pasar en estos días previos al debate electoral? Le preguntamos. Contestó: “Esa pregunta habría que hacérsela a los ciudadanos en general”.
Así pues, la temperatura electoral aumenta no solo en Ibagué, sino en el departamento y en el país. Es la disputa entre lo nuevo y lo viejo, entre la novedad y el continuismo de los mismos con las mismas, entre la izquierda y la derecha…
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