Fernando Loaiza Gutiérrez.- Foto Nelosi |
Durante tres días recorrimos algunos cabildos y resguardos indígenas del municipio de la dulce Coyaima indiana remanso fresco de mi niñez. Lo hicimos como miembro del comité central del Partido Comunista Colombiano, sin seguridad porque la Unidad Nacional de Protección (Unp), nos negó la seguridad a pesar de tener tres amenazas contra nuestra humanidad.
Un calor abrazador. Temperaturas que fácilmente superaban los 38 grados centígrados, un sol brillante, espléndido y una bóveda celeste azul intensa. Gracias a la solidaridad de los comunistas de este municipio y los miembros de la Unión Patriótica, la gira resultó todo un éxito.
Hablamos en Totarco Dinde, el resguardo de Aguas Frías y en Mesas de San Juan, promocionando los candidatos de la Unión Patriótica: Mauricio Jaramillo Martínez, candidato a la gobernación; Danilo López Carrero, 52 en el tarjetón nuestro candidato a la Asamblea del Tolima, lo mismo que los candidatos comunistas que hacen parte de la lista de la Unión Patriótica al concejo municipal, y el respaldo a la candidatura a la alcaldía de Coyaima, del ingeniero Carlos Andrés Tovar Otavo, familiar del primer alcalde comunista que tuvo Colombia, José Nelson Tovar Rojas.
Impresiona recorrer la extensa llanura coyaimuna. No hay rastro de vida vegetal. Los árboles se han secado, lo mismo los pastos. Camina a pasos agigantados el desierto de la Tatacoa. Una y otra vez, nos hacíamos la misma pregunta: ¿De qué viven los indígenas de Coyaima? Causa pánico recorrer la desértica región sin el menor amparo del gobierno central y el mismo gobierno departamental. “Por aquí cruzó el actual gobernador Luis Carlos Delgado Peñón sembrando ilusiones, ilusiones que quedaron suspendidas en el espacio porque no se hicieron realidad”, dijo el gobernador indígena de Mesas de San Juan.
La tierra está cuarteada y como si fuera poco hay por todos lados incendios. Al parecer unos accidentales y otros provocados por indígenas que no alcanzan a dimensionar los efectos ambientales a corto y mediano plazo.
“Este verano que amenaza arrasar con todo – dijimos – no es obra de Dios, es obra de este maldito sistema capitalista depredador por excelencia. Por eso, la necesidad de unirnos para construir un sistema distinto, humano, que se preocupe por la naturaleza, el agua y la vida”.
Quien lo creyera, pero a pesar de ese desierto, los indígenas, hombres y mujeres, surgen con alegría y esperanza, pletóricos de sueños. “El Partido Comunista nos ha enseñado a resistir y por eso venimos resistiendo”, dijo Rubiela Briñez con sus emocionantes palabras bajas de todo, pero intensas de emotividad.
Nos desplazamos en moto. En una de esas salidas la moto cayó estrepitosamente y sufrimos algunas laceraciones en la piel no de gravedad afortunadamente, de regreso de Totarco Dinde al filo de las 7 de la noche. La solidaridad del Partido estuvo al instante y otra moto nos recogió y nos llevó al perímetro urbano.
De regreso del cabildo Aguas Frías, cruzamos por Amayarco para observar el imponente espejo de agua en medio del “desierto”. Es la gran obra del triángulo del Tolima, que tanta lucha generó en el primer alcalde comunista que tuvo Colombia, José Nelson Tovar Rojas. Es una obra impresionante. En uno de sus costados dialogamos con el indígena comunista, Fernando Loaiza Gutiérrez, aspirante al concejo municipal de Coyaima, marcado con el número 3. Hace un recuento brevísimo de la obra. Denuncia que los terratenientes los tienen en la mira para desplazarlos ahora que hay agua. Se propone realizar desde el concejo una lucha por la defensa del medio ambiente.
El diálogo realizado a la vera de la presa Zanja Honda, es el siguiente:
- ¿Cómo analiza usted esta inmensa obra de arte de ingeniería como es el triángulo del Tolima y concretamente la presa de Zanja Honda, que está “inmóvil” ante nuestros atónitos ojos?
Esto para nosotros los indígenas es muy bonito, es casi una reliquia porque en el municipio no la teníamos y ahora que se nos dio y estamos trabajando sobre esto, porque de esto depende mucho nuestra alimentación de la población indígena que cubre las 45 mil hectáreas que tiene de riego la presa Zanja Honda.
Lo que no nos puede quedar un en claro de pronto es el desplazamiento de la gente por parte de personas que tienen y vienen a comprar a los indígenas los predios y se lo pagan al valor que ellos quieren, donde una misma persona indígena puede comprarle porque ya ha sido desplazado por estos señores dueños de la plata.
Entonces, nosotros acá en el municipio estamos tratando de hacer un grupo de que no dejamos vender, ni nos vamos a dejar desplazar del municipio por causa del dinero. Mucha gente que está viviendo alrededor de la presa tienen sus fincas y hay personas que les ofrecen mucha plata, pero no queremos que eso sea así, que ellos mismos y sus hijos manejen lo que es el turismo de nuestro municipio, que eso donde vamos a quedar de pronto afianzados con el turismo a nivel municipio y a nivel departamental o nacional.
Eso también como indígenas tenemos mucho que hacer, mucho que ver y mucho que dar a conocer dentro de nuestro municipio y de la ciudad que no conocen los productos que cultivamos acá dentro de nuestro municipio, que con el futuro alcalde (Carlos Andrés Tovar Otavo), vamos a tener la oportunidad de hacer unos cultivos transitorios y otros fijos a largo tiempo que son como los cultivos de mango, limón, naranja, cítricos y todo eso, cultivos que no los tenía porque en muchos años se había peliado la tierra y el agua para este municipio, se había peliado la represa, nunca los gobiernos habían puesto sus ojos en este gran depósito de agua, que es el que nos da la vida, nos da el sustento para nuestras comunidades. Hay personas que vivimos acá y no quieren de pronto, no pueden o no tienen la posibilidad de trabajar como los que hemos estudiado la parte de la agricultura, la agricultura orgánica y la agricultura que tenemos ancestral. No están haciendo posibilidades para eso, están dejando que las cosas se acaben, prefieren vender y irsen para otros lugares.
- Es decir, ¿Comienzan a mirar ustedes con preocupación que los grandes terratenientes ahora sí quieran tomar posesión de estas tierras que antes eran desérticas, sin agua?
Sí, sí, como no. Para eso hay que resaltar de pronto a unos señores que hacen años están acá en la represa y que antes de la represa que pasaban de sus pequeñas parcelas por esos terrenos hacia la presa o hacia el río que quedaba anteriormente por aquí y resulta que en estos momentos estos señores le prohíben y le ponen hasta cerca eléctrica para que los indios no pasen por ahí, pero vamos a ver qué hacemos porque eso es despojarnos, desplazarnos del territorio que tenemos.
- Otra preocupación es que el planeta se está quedando sin agua. Este río Saldaña que hoy nutre esta inmensa presa podría desaparecer ante la política minera. No sé qué conocimiento tenga de ello y cuál sería su preocupación.
El pueblo indígena en general, no está con la capacidad como de detener esa explotación minera, lo que pasa es que, como pasa en todas partes, el gran capitalista viene y les ofrece cantidades de dinero a las personas y mire. Ustedes para qué trabajan aquí, usted se está muriendo de hambre, es mejor que se vaya con esta plata, se va para la ciudad y vive sabroso. Resulta que la plata la recibe y se va para la ciudad y cuando vuelva de por allá, se le acaba la plata, viene otra vez donde nació y no tiene ni siquiera donde poner los pies.
- Uno de los grandes hombres indígenas que estuvo al frente de esta obra, que recibió garrote de la fuerza pública, gas lacrimógeno del Esmad, fue José Nelson Tovar Rojas. ¿Qué sabe usted del gran esfuerzo que hizo este gran líder comunista por esta obra que hoy se hace realidad y que desafortunadamente no tuvo la posibilidad de verla?
Es una lástima que el gran fundador de nuestro Partido y la Up, acá como políticamente estamos mirando, se acabó y no vio la obra, ni vio el embalse como de pronto él lo soñó, pero lo dejó para que los indios que estamos lo disfruten, pero es una lástima. De todas maneras, que los indios que habemos lo aprovechen este gran depósito de agua.
- Finalmente, usted está aspirando a ser concejal por la Unión Patriótica. ¿Cuáles son las propuestas en relación con la defensa del triángulo del Tolima y las expectativas que tiene el pueblo de Coyaima y el sur del Tolima?
En sí estoy mirando en defender el medio ambiente, tratando de que las comunidades nos unamos en contra de la minería, en contra de la tala de los árboles, de todas maneras hay algunos árboles que ya están de edad y hay que cambiarlos pero es que descuidamos, en que tumbamos un árbol viejo, pero no plantamos los otros, ese es el gran error que tenemos que no cuidamos la naturaleza, nosotros debemos cuidar la naturaleza y menos quemar los cultivos y los bosques que tenemos de nacimiento.
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