La Política es el ejercicio del Poder

Interviene el camarada Raúl Antonio Ávila Suárez. Foto Nelosi

Por Nelson Lombana Silva

Se realizó ayer en la ciudad de Ibagué (Tolima) un taller básico sobre política,  el pretexto era reactivar el departamento político del Partido Comunista Local Ibagué. Los asistentes llegaron tempranos y dispuestos a participar activamente del encuentro con sus preguntas, aportes y críticas leninistas.

Al final se pudo cumplir cabalmente la tarea, cuando los compañeros y compañeras decidieron voluntariamente hacer parte del Departamento, el cual se convierte en un soporte básico para la secretaría política. Es un grupo “asesor” con la perspectiva de contribuir decididamente a desarrollar la política comunista en la ciudad musical de Colombia con 500 mil habitantes aproximadamente.

El encuentro estuvo direccionado por el camarada Raúl Antonio Ávila Suárez y el suscrito en nuestra condición de secretario general del Partido en esta ciudad.

La exposición del camarada Ávila Suárez estuvo encaminada a plantear la política como “arte de gobernar”. La complejidad de las relaciones y la dinámica en los asuntos de la cosa pública. “No todo es política”, dijo. Criticó el aparataje de la burguesía que utiliza a diario para sostenerse en el poder contra la voluntad del pueblo colombiano. Se refirió a tener clara la política de los comunistas porque a partir de allí se afianza y se construye la unidad del Partido. “La identidad del partido – dijo – se fundamenta en tres aspectos: Estatuto, Programa y Línea Política”.

“Es la identidad del Partido que hay que conocer, estudiar y sobre todo defender constantemente ante los oportunistas que buscan pasar por encima de los estatutos y actuar anárquicamente como cada uno suele pensar”, subrayó. Una vez más llamó a la unidad y a tomar decisiones siempre con fundamento en nuestra identidad.

Nuestra intervención giró en escrutar la política como ciencia, partiendo de conceptos elementales como introducción a lo que hay que profundizar con la militancia y la militancia con el pueblo ibaguereño.

Consideraciones previas

Para llegar a una definición aproximada se trata de tomar dos caminos: Uno el popular y el otro el academicista, confrontar esos puntos de vista y hacer a groso modo una especie de síntesis para entonces sí llegar a una definición.

Sin embargo, más que llegar a una definición de lo que se trataba era de encontrar su importancia y el papel de los comunistas en su asimilación para fortalecer el plan tanto táctico como estratégico. Es decir, la labor transformadora.

Resulta común expresiones del pueblo prisionero en el analfabetismo político, tales como: “Odio la Política”, “No vivo de la Política”, etc. ¿Cómo refutar políticamente estas afirmaciones? Ese era el sentido del taller, teniendo en cuenta que el proyecto socialista en el cual estamos inmersos tiene tres características: Humanista, Científico y Democrático.

Se trataba de convencernos de que los comunistas siempre tenemos que tener en nuestros labios una respuesta más o menos con estas características. No podemos hablar por hablar. Es más, reconocer la dinámica del movimiento, lo cual implica que los cambios son permanentes y los comunistas tenemos la obligación política de no desligarnos de esa realidad objetiva. También buscábamos dar elementos para entender las contradicciones internas, tener elementos políticos para fijar posiciones políticas autónomas, propias encaminadas a defender la unidad y blindar al Partido de los oportunistas y enemigos de clase que siempre están al acecho.

Brevísima historia

Acudimos al planteamiento de Fernando Savater para sustentar la importancia de la política, su sentido y valor, cuando dice: “Los antiguos griegos, a quien no se metía en política lo llamaban idiotés; una palabra que significa persona aislada sin nada que ofrecer a los demás, obsesionada por las pequeñeces de su casa y manipulada, a fin de cuentas por todos”.[i]

De otra parte, hicimos referencia al filósofo Aristóteles, quien nació en la ciudad de Estagira (Tracia), república de Grecia (384 – 322), es decir, hace más de 2.100 años. Él escribió un libro llamado: “La Política”, la cual relaciona con el Estado. Dice: “Todo Estado es, evidentemente, una asociación, y toda asociación no se forma sino en vista de algún bien, puesto que los hombres, cualesquiera que ellos sean, nunca hacen nada sino en vista de lo que les parece ser bueno”.[ii]

Era entender la relación de la Política con ese aparato llamado Estado. ¿Cómo dimensionar esa relación? Acudimos al concepto de Política emitido por Rosental e Iudin: “Política es la participación en los asuntos del Estado, la orientación del Estado, la determinación de las formas, de las tareas y del contenido de la actividad estatal”.[iii]

El concepto cerrado de que política era simplemente votar se hacía añicos, un nuevo concepto, muchos más universal, se iba abriendo camino.

También hicimos referencia al italiano Antonio Gramsci, quien dijo: “Existen realmente gobernados y gobernantes, dirigentes y dirigidos”. Parece algo elemental. No obstante, al profundizar esa relación y dinamizarla encontramos que se encuentra cruzada por la alteridad política. Es como decir que la política es la ciencia que nos permite interpretar correctamente esta relación e incluso, transformarla en una relación distinta que permita la desaparición de esa relación sobre condiciones objetivas y concretas del desarrollo político y revolucionario de la humanidad. 

Por supuesto, que no podía faltar el pensamiento leninista en este taller sobre política. Su aporte ha sido definitivo en la comprensión y desarrollo de la humanidad en todas las áreas del conocimiento.

Comienza por algo básico, al decir que el Estado no ha existido siempre. Eso resulta importante durante la discusión, pues se imaginaba que el Estado era eterno e inmodificable. En palabras suyas: “La historia demuestra que el Estado, como aparato especial de coerción de los hombres, surgió únicamente en el lugar y en la época en que apareció la división de la sociedad en clases”. [iv]

Agrega el camarada Lenin: “A medida que surge y va afianzándose la división de la sociedad en clases, a medida que surge la sociedad de clases, surge y se afianza también el Estado”.[v] Podría decirse que el Estado apareciera como árbitro de las clases sociales que hacen parte del capitalismo. Pero no es cierto. El Estado Capitalista está al servicio de la clase dominante, en esta oportunidad la Burguesía. Por eso se llama Estado Capitalista.

Lenin llama a este Estado máquina. Dice textualmente: “El Estado es una máquina para mantener el dominio de una clase sobre otra”. [vi] A partir de allí se puede entender perfectamente que todas las medidas que toma el gobierno del Estado Capitalista apuntan a defender la clase dominante, la burguesía.

Para rematar esta parte, acudimos a la definición etimológica de la palabra Política y encontramos que es de origen latino: “Politicus” y este del griego que traduce: “Civil”, relativo al ordenamiento de la ciudad o los asuntos del ciudadano.

La principal característica de la Política es la fuerza, es decir, El Poder. La política – en consecuencia – es el ejercicio del Poder. El Poder no es  abstracto, es concreto. Señala Fernando Savater: “La política no es más que el conjunto de las razones para obedecer y de las razones para sublevarse”.

¿Cómo puede decirse deportivamente que se es apolítico, sobre todo cuando el filósofo Aristóteles dice que el hombre es un animal político por naturaleza? Lo que existe es un profundo analfabetismo político, que se va superando teorizando y practicando. No se puede desconocer la complejidad de la Política. Por eso, resulta demasiado ingenuo decir: “¡Me lo sé todo!”

En relación con el tema del Poder, bueno resulta traer a colación la tesis de Michel Foucault, quien habla de la diada, presentándola así: “Donde hay poder hay resistencia”. Sobre el tema, Rubén Darío Arroyo Osorio, dice: “Con esta diada de interrelaciones Michel Foucault enseña que históricamente el dominio del poder político no ha sido una situación en la que unas fuerzas se imponen y otras se someten sin confrontación alguna”.[vii]

Formación integral del cuadro Comunista

La crisis integral que vive el pueblo colombiano no exceptúa la crisis interna del Partido Comunista, por una razón elemental: El Partido Comunista es pueblo por antonomasia. Además, está integrado por seres humanos que pueden equivocarse o ser permeado por el enemigo de clase o víctima de las debilidades ideológicas. De todo se puede dar, casi que es “normal”.

Por eso, la preocupación de la dirección local del Partido en Ibagué en la formación integral de sus cuadros, considerando que es todo un proceso dispendioso, con avances y retrocesos. Apunta la dirección en el mejoramiento del nivel intelectual, ideológico y ético. Es decir, teórico y práctico, marxista – leninista, en el mejor sentido de la palabra.

¿Qué es un cuadro Comunista? Responde el inolvidable comunista portugués, Álvaro Cunhal: “Todos los miembros del Partido pueden ser cuadros del Partido, pero muchos no lo son de hecho. Son cuadros los miembros del Partido, que desempeñan tareas responsables en cualquier escalón. Pero también son cuadros todos aquellos que se esfuerzan abnegadamente en el cumplimiento de sus tareas, cualesquiera que ellas sean”.[viii]

Agrega: “Cuando se aborda la política de cuadros del Partido, se mencionan en general tres aspectos fundamentales: El conocimiento de los cuadros, su preparación y formación y su selección y promoción”.[ix]

Palabras finales

Hemos dejado elementos para la discusión y el análisis. Elementos para asumir posición política frente a la crisis. El interés de la dirección es compartir conocimientos y de doble vía que permita subir el nivel ideológico. Frente a cualquier discusión ideológica nuestro norte es claro: Los Estatutos, el Programa y la Línea Política de los Comunistas. Diferenciar la relación política de la personal es básico.

Queremos destacar algunas opiniones de los asistentes. Son aportes importantes que se dieron durante el taller. “No confundir las relaciones personales con las relaciones políticas”, Ruth Nieto Martínez; “Son nuevos conocimientos que hay que tenerlos claros. El mayor terrorista en Colombia hoy son los medios de comunicación. La unidad debemos llevarla más allá de la teoría, en la práctica, porque de nada nos sirve teorizar y no practicar”, Juan Carlos Prieto; “Me interesa mucho aprender, tengo muchos dogmas, pero al uno meterse a estudiar se va metiendo en otros conocimientos importantes y liberadores”, Doris Romero;

“No todos somos poseedores del discurso claro, pero con talleres como estos llevamos conocimientos nuevos para compartir en casa y con nuestros vecinos”, José Miguel Cárdenas; “El conocimiento de la política nos permite determinar y tener claro de dónde venimos, qué hacemos y para dónde vamos. Estudiar los estatutos, el programa y la línea política son fundamentales para resolver todo brote de división. Se trata de aplicarlos. Los estatutos son los que  nos dan las órdenes, por eso hay que cargarlos y estudiarlos permanentemente. Su aplicación consciente es el camino para la camaradería. La solidaridad es la moral del revolucionario”, Libia Esquivel;

“Me gustaría hacer parte del aparato político. Es esencial ser político. Los estatutos, el programa y la línea política son los ejes fundamentales. Para ser comunista debe militar, ser de una célula, cotizar y cumplir conscientemente los principios leninistas de organización”, Gilberto Salinas Novoa. “Si tenemos clara la política, tenemos clara la lucha revolucionaria. La riqueza colombiana debe ser de los colombianos”, Raúl Antonio Ávila Suárez.

[i] La Política explicada a los niños y jóvenes. Ediciones Desde Abajo. Primera edición febrero 2002. Página consultada 5.

[ii] La Política. Aristóteles. Impreso en Colombia por gráficas modernas. Ediciones universales – Bogotá. Página consultada 23.

[iii] Rosental – Iudin. Diccionario filosófico. Ediciones universales – Bogotá. Graficas modernas, Bogotá. Diciembre de 2004. Impreso en Colombia. Página consultada 367.

[iv] Lenin, V.I. obras escogidas en tres tomos 3. Editorial Progreso. Moscú. Traducido al español. Editorial progreso, 1981. Página consultada 261.

[v] Ibíd. Página consultada 263.

[vi] Ibíd. Página consultada 264.

[vii] Semanario VOZ La verdad del pueblo. Edición número 2788. Página editorial 5.

[viii] Cunhal, Álvaro. Un Partido con paredes de cristal. Ediciones izquierda viva. Página consultada 77.

[ix] Ibíd. Página consultada 79.