 |
| Jaime Palma Rondón. Foto Nelosi. |
Al parecer las intenciones del alcalde de Ibagué, Guillermo Alfonso Jaramillo Martínez contra el hospital San Francisco, que apoyó su padre siendo ministro de salud, eran negras. Nada más y nada menos que liquidarlo y aprovechar la extraordinaria infraestructura para montar allí un negocio privado. Así lo deja entrever el dirigente sindical de este histórico hospital ibaguereño, Jaime Palma Rondón.
La ofensiva la comenzó el anterior alcalde, Luis H. Rodríguez, quien al parecer pagó $200 millones de pesos a Orlando Rodríguez Carvajal para que levantara un estudio, estudio que rechazó el concejo municipal de la época, siendo archivado. El médico Jaramillo, ni corto ni perezoso al parecer lo desempolvó pagándole al mismo tipo al parecer $90 millones más para ser actualizada sus cifras. El estudio señala que lo más viable es la liquidación del San Francisco, según indica el dirigente sindical.
Pero, ¿Por qué se empecina el doctor Orlando Rodríguez Carvajal en señalar que la salida más plausible es la liquidación? Al parecer, según el líder sindical porque la liquidación tendría un monto de $1.700 millones de pesos.
Gracias a la presión unitaria de los trabajadores de la mano de este sindicato al parecer el alcalde Jaramillo Martínez ha dado un reversaso y ahora viene hablando, sobre todo en las últimas semanas, de fusión del hospital San Francisco y la USI. Jaime Palma Rondón, señala que los trabajadores están a la expectativa por cuanto algo no muy sana se podría estar cocinando en esta iniciativa.
El caballito de batalla de las administraciones municipales es que supuestamente no pueden existir varias empresas prestadoras de salud de un mismo nivel en una ciudad. Esa tesis la rechaza categóricamente el dirigente sindical. Dice que no es cierto. Primero, porque hay varias ciudades con varias ESE del mismo nivel y dos, porque al parecer la ley lo que dice es que en cada ciudad debe existir como mínimo una y no única como tratan de hacer creer los mandatarios municipales, manifiesta, Jaime Palma Rondón.
La página web: www.pacocol.org entrevistó al compañero Jaime y así contestó los interrogantes formulados:
- ¿Cuál es el problema actual del hospital San Francisco de la ciudad de Ibagué (Tolima)?
La actual administración municipal de Ibagué ha querido acabarlo. Los anteriores alcaldes le han hecho el quite por el costo político que implica cerrar este hospital de tanta tradición y servicio a la comunidad, por cuanto hay que decir que este hospital se preocupa por atender a los pobres de la ciudad y del Tolima.
En la actual administración, al contrario de los anteriores alcaldes, sí está empeñado en liquidar el hospital, en acabarlo, saliendo gravemente perjudicada la comunidad. Lo curioso es que el estado invierte millonadas en la construcción de infraestructura, en el caso del San Francisco, invirtieron $18 mil millones de pesos dizque como un regalo para la comunidad ibaguereña; al dejar de ser público el hospital todo pasaría a manos de privados. Mediante la figura de la Alianza Pública Privada (APP), significaría que el estado pone las modernas instalaciones y los privados se quedarían con las ganancias en su totalidad.
- ¿Cuántos trabajadores tiene el hospital San Francisco?
En este momento tiene aproximadamente 250 trabajadores, de todas las modalidades de contratación que existen.
- ¿Cuál es la cantidad de población que atiende este hospital?
La comunidad que se atiende, como se presta mucho el servicio de urgencias, pues podríamos decir que se atiende prácticamente toda la ciudad de Ibagué, todas las 13 comunas.
- El calvario para el hospital comienza con el ex alcalde Luis H. Rodríguez. ¿Cómo es esta historia?
La historia es la siguiente: Desde hace unos años los entes territoriales, secretaría municipal y departamental de salud, son los que han querido que haya una sola empresa. No miran el daño que hacen, ellos miran es la disminución de trabajo.
En este momento los recursos llegan y tiene que distribuirlos en dos empresas, los informes lo mismo. Dicen que haciendo una sola empresa se evitarían todo ese trámite. Es decir, para mí esto sería más una cosa de pereza. Lo que no están mirando es el beneficio que se origina a las dos empresas. La tendencia es a crear más empresas y no a acabarlas. Una sola empresa habría menos recursos para la salud. Es en realidad, un embeleco inventado por los entes territoriales.
Los alcaldes han visto la posibilidad de liquidar una empresa, pero al liquidarla, crearían una nueva pero de carácter privado con trabajadores cancelados en precarias condiciones sin ninguna estabilidad laboral, con salarios de miseria. Al ladrón se le brinda la ocasión.
- El caballito de batalla es que hay en la ciudad dos entes del mismo nivel y hay que acabar uno por ley. Es decir, obligatoriamente. ¿Eso es cierto?
Hasta el momento el alcalde no ha podido probar eso. He hablado con expertos en el tema y la ley 1438 en un artículo que no recuerdo dice que debe haber como mínimo una empresa. El alcalde ha tergiversado este concepto y dice que debe haber una sola empresa. Considero que eso es falso. No creo que ningún gobierno en el mundo vaya a ser tan bruto (me perdona la expresión) que pudiendo mejorar un servicio lo vaya a desmejorar. Dejar una sola empresa es como darle una puñalada al usuario. Decirle: Yo estoy en San Bernardo, como hay una sola empresa tiene que irse usted hasta el Yuldaima para ser atendido. Al contrario. Hay que crear una empresa cercana. Se debe descentralizar el servicio. En muchas partes de Colombia hay varias empresas sociales del estado en la misma ciudad. ¿Por qué dice que hay que dejar una sola? Porque sacaría gente, nuevos contratos, servicios particulares. Ese es el empeño de privatizar.
Le digo una cosa: Entre el San Francisco y la USI hay 500 personas. Dice que las empresas no son rentables. Entonces de esas 500 sacan 400 y le aseguro que en un año vamos a mirar y ya no hay 500 personas, hay unas 800 personas. Sería una verraquera porque meterían los politiqueros de oficio 700 personas nuevas. Sería un gran negocio privado.
- El primer zarpazo decíamos lo inicia el ex alcalde Luis H. Rodríguez. ¿Quién hace ese estudio y cuál fue su costo?
En el gobierno municipal de Luis H. Rodríguez con el cuento que no debería haber sino una sola ESE (Empresa Social del Estado), cuento que ni él mismo se lo comió, sabía que era mentira, aprovechó para pagar un favor político me imagino y contrataron a un señor que se llama Orlando Rodríguez Carvajal.
Este señor hizo el estudio, cobró $200 millones de pesos, montó unos escenarios y como la política durante la administración de Luis H. era liquidar el San Francisco, dejó como resultado del estudio, montó seis escenarios pero de estos seis escenarios el de mayor puntaje era el de liquidar al San Francisco, que era el 90 por ciento.
Él dejó el estudio hecho, pero cuando éste fue al concejo municipal, fue tumbado. Luis H se dio cuenta que era un error y entonces dejaron este estudio archivado y engavetado.
Ahora, en el gobierno municipal de Guillermo Alfonso Jaramillo Martínez, en el año 2016, volvió a desempolvar dicho estudio, fue actualizado con cifras nuevas y salió nuevamente el alcalde con el cuento nuevamente de que era necesario liquidar el San Francisco. En el año 2007, el alcalde se dio que el estudio tenía inconsistencias e incoherencias, entonces ahorita no habla de liquidar sino de fusionar las dos empresas.
- ¿Quién hizo la actualización de ese proyecto? ¿Quién lo hizo?
Se habla de que costó $90 millones. Realmente a mí no me consta. Se dice que se pagó $90 millones, otros dicen que no costó nada, pero todo apunta a que costó más o menos alrededor de $90 millones de pesos la actualización de las cifras.
Lo que pasa es que esa información está muy callada, no la han querido suministrar porque seguramente les da pena o les da miedo ser investigados. Siempre han tapado este cuento. No hemos tenido respuestas oficiales.
Ahora, yo creo que el que lo hizo esa actualización no haya cobrado, teniendo en cuenta que a ese señor le gusta tanto la plata. Fue el mismo Orlando Rodríguez Carvajal. Primero trabajó al servicio de Luis H. Rodríguez y ahora al servicio de Guillermo Alfonso Jaramillo.
Este señor está mirando otro cuento: Este señor es como el rey Midas, todo lo que toca lo convierte en oro. Su estudio siempre lo enfocó a liquidar una de las dos empresas, en este caso le tocó al hospital San Francisco, pero la idea de él era liquidar una empresa para que hubiera un proceso de liquidación y él ya tenía unas cuentas alegres que por este concepto le pagarían 1.700 millones de pesos como agente liquidador.
Otra cosa: Si yo soy alcalde inteligente y consecuente no andaría pagándole 200 millones a uno, 90 al otro, 1.700 millones al otro, 5 mil al otro. Más bien cojo, pago las deudas y fortalezco financieramente las dos empresas y no les regalo esa plata a los particulares. Me parece que la tendencia de esta alcaldía es como a pagar a terceros, en vez de coger esa plata e invertirla nuevamente en el servicio de salud.
- A ver si le entendí: El doctor Jaramillo mandó a actualizar ese informe archivado por el concejo municipal porque no sirvió. Pero resulta que el nuevo informe donde se pagó al parecer 90 millones de pesos más, tampoco sirvió. ¿Es así? Ahora, el alcalde habla de fusión, ¿Cómo sería esta fusión?
Estamos a la expectativa sobre la “famosa” fusión. Él comenzó a hablar de fusión fue la semana pasada, porque hasta la semana pasada hablaba era de liquidar al hospital San Francisco, pero ya vio que eso no le funciona, porque creo que ni los concejales le quieren caminar a eso, la comunidad, el costo político, entonces estamos a la expectativa a ver cómo es que va a ser esa fusión.
Se dice que esa fusión también trae su “veneno” y me imagino, conociéndolo a él como es, él no va a favorecer a la gente, él debe estar trayendo un as bajo la manga que es lo que nosotros más a esperar escrudiñar a ver cómo es que va a ser ese cuento de la “famosa” fusión.
En este momento no sabemos, solamente ha habido unas reuniones con el gerente, pero con el gerente la verdad sea dicha, con él no se cuenta porque él es un alfil del alcalde y a él también lo mandaron a hacer esa misión, a liquidar el San Francisco. Vamos a mirar qué pasa, vamos a reunirnos con las organizaciones sindicales de las dos empresas y con la gerencia para mirar a ver cómo es la cosa. Nosotros estamos a la expectativa. Si nos dimos la pelea contra la liquidación, vamos a seguir con la pelea, porque la idea es que no salga perjudicado ningún trabajador y no tanto los trabajadores sino la comunidad, porque el más perjudicado es la comunidad y es ella la que no ha querido entender que ella es la perjudicada.
En el marco de la desinformación podría decir la comunidad: Bueno, sale un poco de zánganos, de funcionarios. Pero cuando le toque a la comunidad pagar los servicios bien caros, se dará cuenta pero ya será demasiado tarde. La comunidad no tiene elementos para medir las dimensiones de la lucha que estamos librando. Piensa que liquidar una empresa es fácil porque es reemplazada por otra. Lo que no analiza es que esa otra será demasiado cara, imposible para su presupuesto raquítico, que es la mayoría de los ibaguereños y tolimenses.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario