El restablecimiento de las relaciones diplomáticas de Cuba con los Estados Unidos y la liberación de los héroes cubanos presos en las mazmorras del régimen imperialista injustamente, constituyen un triunfo político de singular valor para la heroica e histórica revolución cubana. De nuevo sale a flote la gesta del pequeño David contra el gigante Goliat.
El anuncio fue hecho casi simultáneamente por los presidentes de las dos naciones: Raúl Castro Ruz y Barack Obama, Cuba y Estados Unidos, respectivamente.
Si bien es cierto que persiste el brutal e inhumano bloqueo económico que supera los cincuenta años, las perspectivas diplomáticas abren avenidas que hacen prever cambios sustanciales del imperialismo norteamericano entorno a este pueblo abnegado que decidió heroicamente construir el socialismo a 90 millas del régimen más corrompido e inhumano como ha sido los Estados Unidos. Además, lo ha defendido con ardentía y coraje, sin miedo y con conciencia de clase desde el mismo arribo al poder el primero de enero de 1959, con el liderazgo inmaculado del comandante Fidel Castro Ruz, entre otros.
Lo anterior es posible gracias a la mediación del Papa Francisco y los buenos oficios del gobierno de Canadá, como bien lo reconocen las partes. “Quiero agradecer y reconocer el apoyo del Vaticano, y especialmente, del Papa Francisco, al mejoramiento de las relaciones entre Cuba y Estados Unidos. Igualmente, al gobierno de Canadá por las facilidades creadas para la realización del diálogo de alto nivel entre los dos países”, expresó el presidente cubano, según recoge Prensa Latina (PL).
A pesar del restablecimiento de relaciones diplomáticas el bloqueo sigue vigente, dice el presidente Cubano, otro histórico comandante de la revolución socialista. “Hemos acordado el restablecimiento de las relaciones diplomáticas. Eso no quiere decir que lo principal se haya resuelto. El bloqueo económico, comercial y financiero que provoca enormes daños humanos y económicos a nuestro país debe cesar”, agrega el mandatario caribeño.
Subraya: “Aunque las medidas del bloqueo han sido convertidas en ley, el presidente de los Estados Unidos puede modificar su aplicación en uso de sus facultades ejecutivas”.
El presidente Raúl Castro Ruz propone a su homólogo estadounidense mejorar las relaciones de los dos países en el marco del derecho internacional, es decir, del respeto mutuo. “Proponemos al gobierno de los Estados Unidos adoptar medidas mutuas para mejorar el clima bilateral y avanzar hacia la normalización de los vínculos entre nuestros países, basados en los principios del Derecho Internacional y la Carta de las Naciones Unidas”, señaló.
Agregó el líder cubano: “Exhorto al gobierno de los Estados Unidos a remover los obstáculos que impiden o restringen los vínculos entre nuestros pueblos, las familias y los ciudadanos de ambos países, en particular los relativos a los viajes, el correo postal directo y las telecomunicaciones”.
Termina diciendo: “Los progresos alcanzados en los intercambios sostenidos demuestran que es posible encontrar solución a muchos problemas. Como hemos repetido, debemos aprender el arte de convivir, de forma civilizada, con nuestras diferencias”.
Diversas reacciones e interpretaciones
La noticia le viene dando la vuelta al mundo político y diversas reacciones se vienen sucediendo desde el mismo momento que se conoció la histórica decisión de los dos mandatarios, quienes se comunicaron vía telefónica, como bien lo explica el compañero presidente cubano Raúl Castro Ruz: “Resultado de un diálogo al más alto nivel, que incluyó una conversación telefónica que sostuve ayer (antier) con el presidente Barack Obama, se ha podido avanzar en la solución de algunos temas de interés para ambas naciones”.
En comunicado que recoge Prensa Latina, el pontífice “se complace vivamente por el restablecimiento de las relaciones, con el fin de superar, por el interés de los respectivos ciudadanos, las dificultades que han marcado su historia”.
La misma agencia de prensa señala la reacción del famoso cantautor cubano Silvio Rodríguez: “Voto por que esta actitud de diálogo continúe de ambas partes, para que podamos vivir en paz como vecinos que somos, y que siempre pesen más el respeto mutuo y las admiraciones de pueblo a pueblo, que las diferencias que sin dudas también tenemos”.
Es un triunfo del pueblo cubano gracias a la tenacidad de su pueblo, gracias a la decisión que ha tenido para construir y desarrollar el socialismo contra viento y marea. Pero también gracias a la solidaridad internacional de los pueblos. El bloqueo económico ha sido rechazado casi que reiterativamente y casi que por unanimidad de los países que hacen parte de las Naciones Unidas. Es un triunfo que alienta a los pueblos que luchan contra el imperialismo y el neocolonialismo. Es brutal y desalmado gigante pero no invencible. Cuba nos lo ha demostrado una vez más y con qué coraje.
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