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| Iván Cepeda. Foto Nelosi |
El senador por el Polo Democrático Alternativo, Iván Cepeda Castro, visitó ayer la ciudad de Ibagué (Tolima) para participar de una audiencia pública sobre el proyecto de constituir una zona de reserva campesina (Zrc) en el sur de este departamento corazón de Colombia.
Durante el evento, el dirigente político habló de varios temas, especialmente de las zonas de reserva campesinas y de los diálogos de paz que se suspendieron por el gobierno quedando en entre dicho la palabra del señor presidente.
A pesas de las vicisitudes, el senador Cepeda Castro considera que el proceso se ha robustecido. Considera que todo este esfuerzo se complementa con el Frente Amplio por la Paz, la Democracia y la Justicia Social. Dice que el año 2015 estará caracterizado por la movilización popular, el debate electoral y el avance del proceso de paz.
La página web: www.pacocol.org habló brevemente con senador Cepeda Castro y esto dijo:
- Senador Iván Cepeda bienvenido a Ibagué. ¿Cuál es el motivo de su presencia en esta oportunidad?
Bueno, que surja una zona de reserva campesina en el sur del departamento. Nosotros respaldamos las figuras de las zonas de reservas campesinas porque consideramos que es una solución a los grandes problemas que tiene el campesinado en este país.
- Las zonas de reservas campesinas han sido estigmatizadas por el gobierno nacional considerando que son iniciativas de la insurgencia. ¿Usted qué opina?
No, las zonas de reserva campesinas han surgido en Colombia como una experiencia de la lucha de resistencia del campesinado. Efectivamente, ahora en el proceso de paz que se está dando en la Habana quedó consagrado en el primero de los acuerdos a los que se ha llegado, las zonas de reserva campesinas, pero eso lejos de ser una aspiración de un grupo armado, es la aspiración de millones de campesinos en Colombia.
No es posible que se auspicie las zonas favorables a la llamada inversión empresarial y que se le otorgue concesiones generosas a las compañías mineras como el proyecto de La Colosa en Cajamarca y ante la exigencia legítima del campesinado se responda con estigmatizaciones y ataques. Eso muestra una política que es favorable solamente a quienes tienen poder y riqueza en esta sociedad.
- Cambiando de tema: ¿Fue correcta la decisión de Santos de suspender unilateralmente los diálogos de la Habana a raíz de la detención del general Rubén Darío Alzate?
No lo creo, porque había un pacto en el que el gobierno y la guerrilla se comprometen a hacer conversaciones en medio del conflicto armado. Pues en medio de la confrontación que hay en Colombia pasan cosas como la del general. Pero, bueno, el presidente decidió suspender y a mi modo de ver es que el proceso de paz ha salido muy fortalecido con este episodio. Así que creo que son buenas las noticias que hay para Colombia en esta materia.
- La iglesia católica ha dicho que la guerrilla tiene seriedad en este proceso. ¿Qué concepto le merece esta opinión de la cúpula religiosa en Colombia?
Coincido con esa afirmación. Lo que hemos visto en el desarrollo de estas conversaciones es que se han ido cumpliendo las promesas que se han venido haciendo. La guerrilla ha ido avanzando en la dirección de buscar la finalización del conflicto con un acuerdo que pueda resolver alguno de los grandes problemas del país y creo que eso es serio; eso hay que estimularlo y protegerlo.
- La guerrilla da muestras, mientras el gobierno no. Por ejemplo, el paquete de proyectos que el gobierno ha presentado al congreso ayuda más a la guerra que a la paz. ¿Cuál es su percepción?
Sí. Esa es una situación que nosotros hemos señalado y criticado porque no es posible que haya una doble agenda, que se diga en la mesa de conversaciones de la Habana una cosa y después se haga otra en el Parlamento.
Si queremos que se resuelva el conflicto armado, que haya unos acuerdos durables, es necesario coherencia; eso se lo hemos dicho al presidente en muy distintos escenarios y de muy diversas maneras.
- Ante el incidente por lo del general la guerrilla ha dicho que hay que precisar cosas. ¿Usted está de acuerdo con esa postura o simplemente borrón y cuenta nueva?
No, yo lo que creo es que a partir del día de hoy (ayer) la guerrilla y el gobierno se sientan a hablar en la Habana para evitar crear unos mecanismos que eviten que vuelva a ocurrir algo como lo que pasó en días pasados. Si hay un compromiso de que no se va a suspender mientras haya hostilidades y haya conversaciones, pues hay que cumplirlos. Es la palabra que se ha empeñado ahí, lo que creo que está reclamando la guerrilla, precisamente, que se cumpla el acuerdo de la Habana.
- ¿Qué se buscaba con la retención del general Rubén Darío Alzate?
Bueno, creo que ahí no había un plan. A mi modo de ver es un hecho que aconteció producto de unas circunstancias que todavía deben ser explicadas. Una vez acontecido, lo importante es que se le ha dado una solución digna y que a mi modo de ver es importante para el fortalecimiento del proceso de paz.
- Para condensar todos estos procesos que caminan en la Habana, ¿Considera usted que la salida es el Frente Amplio por la Paz, la Democracia y la Justicia Social?
Bueno, es una alternativa muy importante, ahí viene confluyendo muchos sectores sociales y políticos y creo que eso va permitir que haya una fuerza proclive a la paz y que va a jugar un papel en los próximos meses y años en la vida política del país.
- Finalmente, ¿Qué le pronostica a los colombianos y colombianas durante el año 2015?
Yo creo que el 2015 va a ser un año decisivo, no solamente porque se va a avanzar mucho en el proceso paz, según lo que se nos dice, sino además, porque hay unas elecciones también muy importantes y también hay un calendario y una agenda de movilización social muy fuerte.
Así que por todos esos aspectos, 2015 va a ser un año que va a mi modo de ver a jugar un papel muy decisivo en la historia de lo que viene en Colombia.
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