El paquetazo que viene preparando el gobierno nacional contra el pueblo colombiano en sintonía con la OCDE y desde luego, el Fondo Monetario Internacional (FMI), demanda de la clase trabajadora una respuesta contundente y consecuente con sus intereses de clase.
El cuestionado gobierno de Iván Duque Márquez estaría esperando que pase las elecciones para su partido, el Partido de la Muerte: El Centro Democrático, presentar en el congreso tan nefastas iniciativas. Así pagará el presidente a sus alienados seguidores y a todos los colombianos y colombianas.
Son reformas letales y antidemocráticas que afectarán directamente no solo a los trabajadores, sino al pueblo en general. ¿Qué busca con esto Iván Duque Márquez? Aumentar las ganancias de los grandes empresarios, seguramente los que dieron su dinero para su campaña electoral. En sentido contrario, disminuir la mano de obra (más desempleo), garantizar el robustecimiento de los fondos privados de las pensiones y apalear (eliminar) Colpensiones. Es decir, acomodar el negocio al tamaño avaro de Luis Carlos Sarmiento Angulo.
De igual manera, fomentar en Colombia el trabajo por horas, el salario mínimo diferencial por regiones, eliminar las horas extras, el pago de dominicales y festivos a los trabajadores, lo mismo que abolir la indemnización por el concepto de los despidos. Una verdadera puñalada trapera a los trabajadores y al pueblo en general prepara el presidente de la mano del Centro Democrático y la clase burguesa más reaccionaria y criminal.
La burguesía, utilizando sus medios de comunicación las 24 horas del día, sostiene la misma manía tesis de que la crisis que vive Colombia es culpa de los trabajadores, los obreros, el pueblo en general. Y repite esta mentira tantas veces que muchos desinformados terminan creyéndola incluso, sindicatos patronalistas que los hay en Colombia por montones.
Se avecina entonces una nueva masacre laboral en este país de vastas proporciones, cumpliendo el gobierno nacional las órdenes de los organismos internacionales de estilo neoliberal. Duque Márquez resulta sumiso a estos organismos, perro faldero e incondicional a los dictámenes de Estados Unidos.
Estas son las razones fundamentales que han llevado a las Centrales Obreras a convocar un Paro Cívico Nacional para el 21 de noviembre. Hay que prepararlo desde ya, creando pequeños y grandes comandos de paro en los barrios y las veredas de Colombia. Y, una forma concreta de prepararlo es rechazando los candidatos de la derecha en las elecciones del 27 de octubre, votando copiosamente por los candidatos de izquierda, candidatos honestos y puros. Hay que ser coherentes y consecuentes.
¿Por qué no contar con el ejemplo que nos viene dando el hermano pueblo ecuatoriano? A pesar de la represión y la violencia de estado desatada por el traidor presidente Lenin Moreno, el pueblo derrotó el nefasto decreto 883 que había impuesto el Fondo Monetario Internacional. ¿Vamos a ser inferior?
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