miércoles, 21 de octubre de 2020

Tolimenses participaron del Paro Nacional

 


Por Nelson Lombana Silva

Bajo un sol espléndido en la ciudad de Ibagué (Tolima), cerca de un millar de personas se movilizaron ayer, demandando del gobierno nacional parar el genocidio y etnocidio que se viene presentando en Colombia.

Las distintas organizaciones sindicales, aglutinadas en las principales centrales obreras, rechazaron contundentemente las reformas antipopulares que hacen trámite en el Parlamento y exhortaron al pueblo tolimense a exigir sus derechos fundamentales hoy en riesgo, como la vida, la democracia, el territorio y la paz.

De igual manera, hicieron un ferviente llamado al pueblo colombiano a la unidad, respetando la diversidad. A fortalecer lazos y puentes que le permitan al pueblo sacudirse de tanta miseria, represión, corrupción y abandono por parte de la clase dominante representada por el inepto presidente Iván Duque Márquez.

El Partido Comunista Colombiano, Local Ibagué, se pronunció por la defensa de la Soberanía Nacional y el rechazo de la política imperialista de Estados Unidos. Demandó del gobierno nacional expulsar de Colombia las bases militares gringas y todo tipo de pretensiones de prestar el suelo colombiano para invadir países hermanos, entre ellos, la República Bolivariana de Venezuela.

De igual manera, demandó el cumplimiento del acuerdo de paz concebido en la Habana y firmado en Bogotá, entre la entonces Farc – Ep y el Estado. El baño de sangre contra los desmovilizados y los líderes populares y sindicales consecuentes, debe parar y los responsables castigados ejemplarmente. Fortalecer un gran frente antifascista y de cara al debate electoral, es compromiso ineludible de todas las fuerzas de izquierda, sectores democráticos y personalidades. El pueblo colombiano se merece una oportunidad y ésta, está en la izquierda.

Pronunciamientos

Jaime Cortés, dirigente sindical de la CGT, condenó la política terrorista que viene desarrollando el presidente Iván Duque Márquez, llamó a la paz, a la reconciliación de los colombianos y a buscar caminos de unidad. Dijo que las fuerzas paramilitares continúan cometiendo fechorías a lo largo y ancho del país.

“Cuando nosotros le planteamos al gobierno nacional el respeto al proceso de paz, le estamos diciendo: Pare su aparato paramilitar, porque no es otra cosa lo que está sucediendo en los campos”, señaló.

Agregó: “En los campos hoy se ondean con sus camionetas, con sus carros, en sus motos, de todas maneras, las fuerzas paramilitares. El desmonte del paramilitarismo nunca se realizó en Colombia. Es una situación que las cifras nos lo dice. El compañero Eduardo Alarcón asesinado el día de ayer (antier) en Campoalegre (Huila), había sido concejal de la Colombia Humana, dirigente campesino toda su vida, luchador por el derecho a la tierra, por el derecho de una Reforma Agraria. Son reclamaciones justas que se hacen en una supuesta democracia”, anotó.

Un dirigente sindical del municipio de Piedras (Tolima), que participó activamente de la movilización, señaló: “Este gobierno es mudo que no escucha las peticiones de su pueblo. Por eso, el pueblo se rebota, exige vida, democracia, paz, negociación del pliego de exigencias. Por eso las federaciones y confederaciones, todas aquí reunidas, estamos protestando, mostrando nuestro inconformismo ante un gobierno que no pone cuidado. La movilización es la única forma que tenemos de mostrar nuestro inconformismo”.

El compañero Valero de Asonal Judicial, subrayó: “Estamos aquí por la vida, la paz, por Democracia, por la salud y por la educación justa para nuestros jóvenes. Estamos en contra de tanto asesinato, de tantas masacres, tantos homicidios selectivos de líderes sindicales, líderes sociales, indígenas, ex combatientes de las Farc, de tantas personas fallecidas durante este año. En lo corrido de nueve meses son más 87 masacres en Colombia, más de 236 muertos de líderes sindicales. Eso no es justo. Eso va contra la democracia, contra la libertad de expresión, de protesta. Todo esto sucede en un gobierno autoritario, criminal, mezquino, que solo sabe ejercer una política de opresión contra el pueblo”.

Juan Carlos Prieto, presidente del sindicato nacional de trabajadores de la seguridad en Colombia (SINTRASECOL), subdirectiva Ibagué, expresó un fraternal saludo a los transeúntes y participantes de la movilización. “Colombia era un pueblo reprimido que ha despertado, un pueblo que ya no come entero, un pueblo que ya no cree en las falencias y en las mentiras del gobierno nacional”.

Agregó: “Queremos denunciar la tercerización en la Unidad Nacional de Protección, donde converge toda la agremiación de compañeros escoltas, alrededor de 7500 a nivel nacional. Denunciamos que se ha venido produciendo el desmonte en las cinco zonas en a nivel nacional, teniendo como consecuencia inmediata el asesinato de líderes sociales. Nosotros protegemos periodistas, políticos, organizaciones sociales, defensores de Derechos Humanos, pero los evaluadores del sistema de riesgo de cada protegido le han dado un puntaje muy bajo y esto haya llevado al desmonte de alrededor de más de 500 esquemas a nivel nacional. ¿Qué quiere decir esto? Que todos los líderes sociales quedaron a merced de la delincuencia común, quedaron a merced de las bandas criminales”.

Subrayó: “Nuestra labor no ha sido reconocida como labor de alto riesgo. Nosotros arriesgamos nuestras vidas día a día. El gobierno al parecer no se ha dado cuenta que nosotros también corremos serio peligro”.

El gobierno nacional no ha querido firmar el acuerdo internacional de especial protección a los escoltas, señaló el dirigente sindical, durante la marcha ayer en la ciudad de Ibagué (Tolima).

Juan Carlos Prieto, terminó su intervención presentando un afectuoso y combativo saludo a la Minga que se encuentra en Bogotá, ratificando el compromiso de seguir adelante con la lucha. “Aquí, estamos firmes y combativos”, señaló.


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