Licenciado en música presente en la biblioteca Cañón del Combeima

 

Por Nelson Lombana Silva

Durante gran parte del presente año, acompañará proceso de música con niños y jóvenes, principalmente, licenciado en música, egresado del conservatorio del Tolima. Se trata de Eymar Díaz Betancourt.

 

La noticia ha causado impacto en los niños y jóvenes que ven con alegría la posibilidad de incursionar en este hermoso arte de la música, para lo cual se aprovecharán las guitarras y los tiples con los cuales cuenta la biblioteca Cañón del Combeima.

La música contribuye al desarrollo psicológico del individuo, a la convivencia en comunidad, a la paz y al entendimiento de áreas como las matemáticas, según ha indicado el docente licenciado que hace parte del programa de Simifarte de la secretaría municipal de Cultura.

Sobre la actividad que piensa desarrollar, la importancia de la música y el proceso a desarrollar en Villa Restrepo, hablamos con el licenciado, Eymar Díaz Betancourt. El diálogo es el siguiente:

-         Licenciado en música que va a prestar su valioso concurso en la biblioteca Cañón del Combeima. Se trata de Eymar Díaz Betancourt. Bienvenido a Villa Restrepo. ¿Qué expectativas tiene de la región?

Muy contento de estar aquí. Soy licenciado en música del conservatorio del Tolima. He venido desarrollando un trabajo pedagógico y educativo en distintos sectores de la comunidad de Ibagué, desde niños con trabajos de estimulación musical hasta el trabajo con universitarios en la universidad del Tolima, en diferentes colegios, con diferentes programas que como tal incentivan el desarrollo cultural y artístico de la música, no solo colombiana sino también enfocados en diferentes contextos y áreas culturales.

-         ¿Qué importancia tiene la música en el desarrollo del ser humano, especialmente en niños y jóvenes?

El desarrollo desde un componente psicológico, sensorial, motriz, afectivo, que es algo muy importante en el cual debemos empezar a reflexionar más, no solo viendo el arte y la música como un punto de vista activista, desde la cultura, desde donde pueda el niño ver o notar o sentir tocando un instrumento o cantando una canción, interpretando una flauta. No es solamente tocar por tocar, sino saber qué representa, el sentir de sus emociones, su sensibilidad.

Entonces, lo que se pretende con este semillero de música de simifarte, abordado por la alcaldía, es estimular los procesos de formación musical en los niños para que puedan tener una idea mucho más amplia de lo que es la música, de lo que representa más allá de tocar un instrumento, más allá de interpretar un instrumento. Que puedan, realmente, arraigar unas sensaciones emotivas que los inspire a soñar, a crecer. Pero, también que les permita la posibilidad de compartir experiencias, de darse cuenta que la música se relaciona con las matemáticas, con el lenguaje, con el arte fundamentalmente; que los niños puedan percibir la evidencia y síntesis desde otras formas mucho más humanísticas.

-         Va a trabajar en la biblioteca Cañón del Combeima durante gran parte del presente año. ¿Qué espera usted de la comunidad, especialmente de los niños y las niñas?

Principalmente que lo disfruten. La verdad a eso es que venimos. Para eso, vamos a hacer unas clases más allá de lo tradicional, lo típico, donde vamos a jugar, vamos a aprender a través del juego, esperando que los niños se lleven unas experiencias significativas, positivistas, hablando desde un componente pedagógico.

-         Precisamente sobre este tema quería hacer énfasis: ¿Pedagógicamente, cómo se enseña la música?

Algunos relacionan, por ejemplo, el movimiento como hecho fundamental que debe tener la educación y formación musical. Es algo que en estos tiempos nosotros los educadores debemos reflexionar y saber con qué realmente el niño tiene un mejor estímulo, un mejor desarrollo.

En mi campo como tal, mi educación básica se basa principalmente en metodologías de carácter sonoro donde estimulamos la percepción del niño, más sensorial, afectivo. Igual pedagogos contemporáneos que tienen la intención de percibir la música con fundamentos psicológicos, donde el niño pueda tener unas capacidades de recepción, concentración, desarrollo de la memoria desde unas formas mucho más conscientes.

-         ¿Qué posibilidades hay de hacer un coro infantil en la biblioteca durante el presente año?

Por supuesto. Es una de las acciones principales dado que el canto es el instrumento principal que tenemos todos los seres humanos. Gracias a la vida, tenemos nuestra voz que es el instrumento que nadie nos puede quitar; cada uno tiene ese instrumento propio y es algo demasiado hermoso porque, te cuento, curiosamente muchos instrumentos han basado su creación para asemejar los sonidos de la voz humana.

Por supuesto, vamos a trabajar la voz. Aspiramos consolidar un semillero de coros también para que los niños puedan estimular el canto y puedan descubrir a través de su cuerpo y de su voz, lo que puede ser un desarrollo musical.

-         ¿Qué instrumentos musicales podrían aprender los niños del cañón del Combeima durante esta capacitación en la biblioteca?

Afortunadamente, contamos con unos instrumentos que tiene la biblioteca pública Cañón del Combeima, unas guitarras y unos tiples. Entonces, vamos a tener estimulaciones y acercamientos hacia esos instrumentos de cuerda pulsada, así como también el canto y procesos vocales como también se había dicho. Además, de mi parte voy a traer una organeta para estimular también procesos de piano.

-         Viene usted con todas las energías a trabajar en esta biblioteca de Cañón del Combeima…

Venimos a disfrutar, venimos a pasar unos ratos bien agradables con los chicos, a compartir y gozar que es lo más importante.