Este lunes 7 de julio, a partir de las ocho de la mañana comenzará la tarea propuesta por la célula “Nelson Castiblanco” de la refacción de la sede departamental del Partido Comunista Colombiano, en la ciudad musical de Colombia, Ibagué, Tolima.
Durante la semana que culmina, en medio de las demás tareas y el encanto mágico del mundial de fútbol, donde nuestra selección voló tan alta y en proyección, el organismo se reunió con el objeto de ultimar detalles y así comenzar a hacer más agradable y atractiva la sede del pueblo tolimense y de todo aquel noble pasajero interesado en discutir la problemática concreta de la humanidad en el capitalismo y las perspectivas de lucha y resistencia en la dinámica de construir las bases del Socialismo humanista, científico y democrático como lo determinó el XXI Congreso Nacional de los comunistas realizado en la ciudad de Bogotá, Colombia.
La respuesta a esta iniciativa celular por parte del colectivo en el Tolima no se hizo esperar y distintas manifestaciones de apoyo y solidaridad se han venido expresando con entusiasmo y hondo espíritu político. Desde el apoyo moral, hasta el económico e iniciativas se han venido recopilando desde el instante mismo en que este organismo decidió discutir y socializar la iniciativa en las respectivas instancias orgánicas del Partido, al extremo de poder decir desde ya que el resultado presupuestado será producto de la acción colectiva, debidamente concatenada y organizada como está impreso en los estatutos, en el programa y en la línea política del Partido Comunista Colombiano.
Nada de personalismos. Nada de hechos aislados. La naturaleza del comunismo tiene directa relación con la antropología humana. El ser humano aisladamente ni existe, ni tiene razón de ser. El hombre es animal sociable por naturaleza, como bien lo dijera Aristóteles. Es decir, el ser humano solo tiene razón de ser en función social. Por eso, la iniciativa fue socializada y discutida en asamblea. No fue por un simple prurito, sino siguiendo la realidad histórica del ser humano y las tesis promisorias de los comunistas.
Esta actividad es un desafío que hay que abrazar con decisión y coraje. Se trata nada más y nada menos que decir y hacer, en otras palabras, teorizar y practicar. Este es el principal fundamento del comunismo. Porque algún filósofo sostiene que el que teoriza y no practica es como el que ara y ara, pero nunca siembra.
Hay la utopía de refaccionar la sede de la mejor manera. Todos y todas, incluso, amigos y simpatizantes están llamados a ser protagonistas de una u otra manera. Que nadie se sienta excluido. Que la dinámica del trabajo nos una y nos haga más humanos, más comunistas. La unidad es el camino y se construye ante todo con la praxis, es decir, el ejemplo. Que linda oportunidad de estar viejos y jóvenes teorizando y practicando en comunión.
Plan de trabajo
El proyecto está presupuestado para una semana larguita. Se ha previsto entonces que de pronto haya mucha gente el primer día y poca en el último. Para tratar de resolver el problema se ha organizado por comisiones, de acuerdo a las posibilidades de los colaboradores. Hay trabajo para todos y todas, pero en forma organizada. Se incluye, igualmente el esfuerzo colectivo para preparar en olla comunitaria el almuerzo única y exclusivamente para la respectiva comisión, se irá llevando el registro de los compañeros y compañeras que participan para el respectivo informe final y el balance que necesariamente hay que hacer una vez culmine la obra. Se proyecta hacer un evento político, cultural y artístico, para la inauguración, en el cual la militancia, los amigos y simpatizantes puedan disfrutar de una sede mucho más organizada y atractiva. Con su apoyo será posible. ¡Manos a la obra!
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