Por Nelson Lombana Silva
A la cumbre regional por la paz, realizada en la ciudad de Ibagué (Tolima), asistió el líder comunitario de izquierda, Javier Alberto Soto Salazar, participando activamente del encuentro.
Este líder popular nació en Armenia (Quindío), el 14 de febrero de 1955. Según él lleva 45 años al frente de la lucha popular y no desfallece. Por el contrario. Lo anima trabajar por la unidad, la paz con justicia social y por los cambios que necesita Colombia.
Agradece a su padre, militante comunista, que de niño lo llevaba a sus eventos. Poco a poco fue entendiendo la lucha de los comunistas vinculándose a ella a partir de 1977 en el marco del paro cívico nacional que estremeció las bases de la oligarquía colombiana. Todo su saber político es obra del Partido Comunista, no duda en reconocerlo. Actualmente, no hace parte de él. Sin embargo, eso no le impide para expresar su admiración gratitud revolucionaria.
La página web: www.pacocol.org habló brevemente con el compañero Javier Alberto Soto Salazar. Esto dijo:
- Compañero Javier Alberto Soto Salazar, ¿Cómo fue su infancia?
Realmente mi infancia fue muy interesante, debido a que mi padre perteneció al Partido Comunista Colombiano en el departamento de Quindío, un honor ser de este departamento, puesto que estamos muy cerca al municipio de Génova, o sea, la tierra del compañero Manuel Marulanda Vélez.
La verdad es un honor decirlo porque es que la política de destierro, la política del saqueo de tierras se ha dado durante muchos años, específicamente en el 48, después que matan al compañero Jorge Eliécer Gaitán; de ahí parte la violencia bipartidista y es ahí donde nace más adelante las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, Ejército del Pueblo (Farc – Ep).
La verdad yo agradezco a mi padre por haberme criado en el seno de la Revolución; me llevaba siendo muy pequeño a eventos del Partido Comunista, a festivales y demás actividades, cosa que me siento muy orgulloso de eso.
- ¿Cómo comienza a asimilar la lucha revolucionaria de los comunistas?
Me inicio y me inserto en la vida política y social en 1977, cuando se hace el primer paro cívico nacional, evento en el cual se sucede mi primera detención por parte del Estado, cuatro días antes fui detenido. Mi padre fue uno de los que medio y faltando un día para el paro cívico nacional salí en libertad, por presión de mi padre, porque los demás compañeros se tuvieron que relegar y sino el gobierno nacional los cogía y los encarcelaba.
Salí de la cárcel con más verraquera, digo yo compañero. He venido insistiendo en esta lucha popular. A nivel del sector popular he llevado en Armenia la defensa de compañeros invasores que el Estado ha pretendido despojarlos de ese derecho a la vivienda. Luchas fructíferas. Hay que conocer la ley para saberse defender.
- ¿Qué estudios tiene usted?
Estudié hasta noveno bachillerato. La mayor escuela que he recibido es la escuela política del Partido Comunista. Ahora, pertenezco a Marcha Patriótica. Marcha Patriótica es la expresión de todas las vertientes políticas y sociales de todo el país. Aquí caben afros, campesinos, indígenas…aquí cabemos todo el mundo. La verdad es que el Estado no nos debe estigmatizar porque pensamos diferente a él y nosotros entre más duro nos den, más duro enfrentaremos esta guerra fratricida que el Estado nos implantado en Colombia.
- ¿Cómo construir la unidad para ser opción de poder cuando tenemos tantas organizaciones populares y políticas en Colombia?
Pues hay que construir unidad respetando cada sector. Todos los sectores deben ser respetados y construir esa unidad en aras o en dirección a una Asamblea Nacional Constituyente, que es la que va a marcar el verdadero derrotero de una participación política y democrática en este país.
En esta cumbre por la paz que se ha realizado en Ibagué (Tolima), he planteado de que no le tengamos miedo a esa Asamblea Nacional Constituyente, porque es el constituyente primario, nosotros, todas las organizaciones sociales que estuvieron inmersos en esta cumbre son todos los que tenemos que participar en la elaboración de ese nuevo proyecto constitucional en Colombia.
- ¿Cómo analiza el proceso de paz que se desarrolla en la Habana (Cuba)?
Yo analizo compañero de que ahí hay ambigüedades, porque para nosotros decir de que todo está negociado es como verraco más bien. Estamos frente a un Estado, frente a una política terrorista de Estado, que en medio de una negociación, este gobierno de Santos sigue entregando la soberanía del país, sigue entregando el patrimonio de todos los ciudadanos de Colombia, como es Isagen; es la política de tierra arrasada del neoliberalismo. Yo no comprendo. Aquí se está sentado en una mesa de negociación y el Estado sigue de rodillas ante el imperialismo norteamericano, entregándole la soberanía de nuestros colombianos a inversiones extranjeras. Ahí, más bien me reservo un poco la opinión sobre estos diálogos.
- ¿Qué elementos hay que tener en cuenta para haya una paz estable y duradera en Colombia?
Hay un elemento muy importante: En este país mientras siga el gobierno, especialmente las fuerzas militares, cohabitando con el paramilitarismo en Colombia, con los rastrojos y con todas las demás organizaciones, llámense como se llamen, organizaciones terroristas de Estado, creo compañero que ahí va a ser muy difícil.
- Según usted, ¿No va a ver paz en Colombia?
La paz tiene que ser con verdadera inversión social en todos los sectores del pueblo colombiano. La verdad que no concibo una paz sin cambios. Sé que la guerrilla de las Farc, no es el M – 19 que entregó la lucha por puestos y burocracia. Creo que este proceso no va a ser de entrega de armas. Dejación sí y es una cosa diferente a entregar las armas. La insurgencia deja esos espacios donde era fuerza, pues vamos a abrirle las puertas a las multinacionales extranjeras, que están adueñándose del país. Ahí, ese proceso de paz, creo que lo dudo como revolucionario que soy.
Aquí tiene que haber un compromiso real del pueblo colombiano que hay que educar, porque si no educamos a este pueblo es difícil llegar a la toma del poder, compañero.
- ¿Qué tiene que hacer el pueblo colombiano para que salga un proceso de paz beneficiándolo en grado sumo?
Eso es responsabilidad de todos nosotros los líderes populares, de todos los cuadros dirigentes del país que estuvieron en esta cumbre regional por la paz, es responsabilidad de nosotros, llegar a las comunidades de nuestras regiones e insertarnos en las comunidades de acuerdo al momento coyuntural, porque esas comunidades tienen problemas, pero bastantes. Pero, esas comunidades lastimeramente están despolitizadas por una empresa política que va a sectores populares a comprar votos con una teja, un bulto de cemento o un montón de ladrillos, cuando el pueblo realmente en un despertar generará un cambio, mientras tanto será imposible. Es duro el trabajo, pero tenemos que hacerlo, compañero.
- Ante todo unidad…
A claro. La unidad, la unidad es fundamental. Y aquí, a partir de esta cumbre regional por la paz debemos decidirnos a fortalecer la unidad. Será el único camino para hallar la paz en Colombia.
- Finalmente, ¿Quién era el compañero Vonley Largo Rada?
El compañero Vonley Largo Rada, fue un gran dirigente en Armenia (Quindío), un dirigente que tenía carisma, un dirigente que tenía discurso, un dirigente que aglutinaba, que movilizaba, que hacía tomas, en beneficio de los compañeros que no tenían vivienda en Armenia. Por ejemplo, en Armenia se fundó el barrio Manuela Beltrán, gracias a la gestión de este gran compañero. Incluso, en la caseta que hay en este barrio, se le ha rendido homenaje a través de una placa como recordatorio a ese gran hombre: Vonley Largo Rada. Fue asesinado y el crimen se mantiene en la impunidad.
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